La producción nacional, medida por la serie tendencia ciclo del índice mensual de actividad económica (IMAE), registró una variación interanual de 7,5% en abril, inferior en 2,3 puntos porcentuales (p.p.) respecto al mismo periodo del año previo.
Aunque el crecimiento económico se desacelera, el informe publicado este sábado 11 de junio por el Banco Central de Costa Rica (BCCR), sugiere que desde el punto de vista del volumen de producción local, la economía muestra fortalezas al mes de abril, a pesar de los choques externos caracterizados por el menor crecimiento de los socios comerciales del país, los problemas en las cadenas de suministro y el aumento de los precios de las materias primas.
La variación porcentual reportada, en los últimos 12 meses, se explicó por el dinamismo de los servicios de hoteles y restaurantes, que reportaron un crecimiento del 54,9% y por la actividad manufacturera, con un 5,9%. También contribuyó el crecimiento en los servicios profesionales y administrativos, con un 7,6%, y de las actividades de transporte y almacenamiento, con un 17%. Estas cuatro actividades explican más del 70 % de la variación del índice general.
En abril destaca que la actividad de hoteles y restaurantes supera, por primera vez y luego de 25 meses, el nivel de producción prepandemia (febrero 2020). En este resultado influyó el proceso de recuperación del turismo receptor y un comportamiento más dinámico del turismo local respecto al año anterior.
Régimen definitivo
Por otro lado, el informe del IMAE señala que se mantiene la recuperación en la producción de las empresas ubicadas en el régimen definitivo, mientras que el crecimiento de la actividad de los regímenes especiales continúa moderándose. Así, el crecimiento de la producción de las empresas del régimen definitivo superó por tercer mes consecutivo el crecimiento de los regímenes especiales.
De acuerdo con el BCCR, esta situación se explica en parte por la baja base de comparación en 2021 en el régimen definitivo, particularmente para el caso de hoteles y restaurantes.
En otra línea, la institución añadió en su informe de abril que el país experimenta choques externos que provocan un aumento de la inflación y que el mayor precio en la importación de las materias primas ha significado un aumento en los costos de producción y un deterioro de los términos de intercambio de la economía nacional, lo que le resta competitividad al sector externo.
En el 2021, el precio de las importaciones de bienes creció 16,6%, en tanto que el de los servicios 9,7%, para un crecimiento medio en el total de 15,3%; mientras que, para el primer trimestre del 2022, se registra un crecimiento interanual de 19% en el precio de las importaciones (20,1% bienes, 14,8% servicios).
“Todo esto ha constituido una fuerza que presiona al alza el nivel de precios de la economía doméstica, con lo cual es posible indicar que, si bien en el largo plazo la inflación es un fenómeno monetario, la inflación actual está en buena parte influida por factores ajenos al control de la política monetaria, que han incrementado el precio de los productos importados (inflación de costos) y por lo tanto provocado un incremento en la inflación doméstica”, señaló el Banco Central en su informe mensual del IMAE.
Para la medición de abril, el BCCR tuvo acceso limitado a registros administrativos provenientes de las entidades afectadas por los ataques cibernéticos. Por ello, para el cálculo del IMAE correspondiente al mes de abril se usaron fuentes de información sustitutas, también provenientes de otras entidades públicas.