Solo una institución financiera declaró interés en participar en el proceso de resolución de Coopeservidores para absorber los activos y pasivos valiosos de la cooperativa que fue declarada en estado de insolvencia.
“Solo una entidad ha confirmado su interés por participar en el proceso de resolución que se desarrolla en Coopeservidores R.L. Por lo tanto, lo que procede ahora es recibir esta oferta para su debido análisis y negociación, lo cual podría durar aproximadamente dos semanas, sin descartarse de que en ese lapso pueda aparecer otro interesado”, informó en un comunicado la Administración del proceso de resolución, dirigido por Marco Hernández, sin revelar el nombre de la entidad.
Adicionalmente, se indicó que Hernández y su equipo se concentrarán en el análisis de la oferta y, en el momento que se tome la decisión, será comunicada oficialmente.
Sin embargo, públicamente el Banco Popular (BP) confirmó este jueves su interés de obtener parte de Coopeservidores. “Iniciamos de manera inmediata el proceso de análisis para determinar cuánto es lo que el Banco, según su apetito, puede asumir en el banco bueno (de Coopeservidores), recalcando la solidez que tiene el Banco Popular”, dijo Gina Carvajal, gerente general del BP.
La jerarca reconoció en un video la intención de ser parte de la negociación “con el propósito de apoyar a miles de familias que hoy tienen allí sus ahorros, pero también con el propósito de fortalecer aún más esta institución (el BP)”. A la vez que aceptó el acercamiento histórico de la institución pública con asociados a cooperativas de ahorro y crédito.
En caso de no ser exitoso el proceso de negociación, se ejecutará el Fondo de Garantía de Depósitos que pagará al 97% de depositantes y ahorrantes hasta por un monto de ¢6 millones. Lo que quede descubierto deberá tramitarse en un proceso concursal mediante la liquidación de la cooperativa, explicó Hernández a La Nación el martes.
El 21 de junio, el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) aprobó el informe de intervención de Coopeservidores, el cual determinó que la entidad es inviable, no cumple con los objetivos de solvencia, y no se prevé que en el futuro próximo cuente con la capacidad para hacerlo. Por lo tanto, se iniciará un proceso de resolución que derivará en el cierre de la cooperativa.
El proceso de negociación convocado por Marco Hernández tiene el objetivo de que los activos y pasivos de calidad de la cooperativa, conocido como “banco bueno”, se transfieran a una entidad financiera solvente.
En tanto, los del “banco malo” –activos que por su calidad u otras consideraciones de deterioro no se incluirían en las negociaciones–, los administraría un fideicomiso con el objetivo primordial de venderlo totalmente en un plazo máximo de un año.
El Conassif aprobó el 13 de mayo la intervención de Coopeservidores a raíz de una serie de anomalías en la administración de la entidad como que ocultó ‘gran volumen’ de créditos malos.