El tipo de cambio del dólar respecto al colón tocó su precio más bajo desde febrero del 2014, y se mantiene en valores mínimos del 2023, a pesar de las fuertes compras de divisas ejecutadas por el Banco Central de Costa Rica (BCCR) con el fin de fortalecer sus reservas monetarias internacionales.
Este miércoles 6 de diciembre, el dólar cerró en ¢531,13, marcando su menor precio desde el 19 de febrero del 2014 (¢530,33). Desde el pasado 27 de noviembre, la cotización se mantiene alrededor de ¢532, con excepción del 30 de ese mes, cuando subió a ¢536,27.
Los datos del mercado de monedas extranjeras (Monex), muestran que el dólar cerró el 4 de diciembre en ¢532,11, y el 5 de diciembre se cotizó en ¢532,32. Antes de este miércoles, la cotización más baja del año fue la del 12 de octubre, ¢532,04.
Durante esta semana, también se negociaron sumas abultadas de dólares en el Monex: $88,13 millones el lunes y $132,16 millones el miércoles. En este contexto, el Banco Central también intervino en el mercado con montos históricamente altos, por medio de operaciones de compra para sus reservas.
Por ejemplo, este miércoles la autoridad cambiaria adquirió $107,85 millones. Esta cifra representa la compra más alta en un solo día en operaciones propias para sus reservas desde el 2006, cuando comenzó a operar el Mercado Monex.
De la misma manera, el lunes 4 de diciembre el BCCR adquirió $83,8 millones para sus reservas, la segunda cifra más alta para un solo día para ese fin, según los datos históricos de la autoridad monetaria.
Melvin Garita Mora, subgerente general de Estrategia y Experiencia al Cliente del Banco Nacional, explicó que este tipo de intervenciones del Banco Central en el mercado cambiario se enmarcan en la búsqueda de la estabilidad externa del colón, que es una de sus responsabilidades.
Garita añadió que Costa Rica exhibe las características de una economía con miedo a flotar, debido a que las apreciaciones y depreciaciones del tipo de cambio afectan de manera significativa a generadores o demandantes de dólares, por lo que esa estabilidad externa cobra mayor relevancia.
A lo largo del 2023, el Banco Central ha mantenido una política activa de compra de divisas debido al fuerte aumento en la oferta de dólares en Costa Rica. La entidad afirmó que mantendrá esta postura mientras las condiciones económicas del país lo permitan, según había reconocido a La Nación.
Para poner en contexto la relevancia de la participación del BCCR en el Monex, de los $132,16 millones negociados el miércoles, el emisor compró el 81,6% del monto total. El lunes, adquirieron el 94,6% de los $88,13 millones transados.
Pablo González Sánchez, analista económico de Mercado de Valores, afirmó que estos niveles de compras son una manera de evitar una mayor caída en el precio del dólar, pues la entidad ha sido enfática en señalar que generará la demanda necesaria para mantener el proceso de formación de precio ordenado en el mercado cambiario.
Costa Rica utiliza un régimen de flotación administrada para establecer el tipo de cambio, en el cual son las fuerzas de la oferta y la demanda las que se encargan de establecer el precio, pero permitiendo la intervención directa del BCCR para corregir volatilidades.
En el 2023, la oferta diaria de dólares que las entidades financieras reciben del público incrementó en $19 millones en comparación con el 2022. Las presiones de la oferta tienden a bajar el precio, mientras que las de demanda tienen el efecto contrario, influenciando al alza la cotización de la divisa.
Según González, los actores del mercado de divisas siguen generando presiones a la baja por el exceso de dólares en la economía, y, en días puntuales, la participación del Banco puede verse alta, aunque también hay momentos en los que compra menos. El analista recalcó que la institución ha sido el principal actor del mercado durante todo el 2023.
Mayor participación
El propósito del Banco Central es finalizar 2023 con el nivel más alto de reservas monetarias en dólares de los últimos ocho años, influenciado por la mayor abundancia de divisas por factores como el turismo, la inversión extranjera, exportaciones y el financiamiento internacional del Gobierno.
Actualmente, el Banco Central sigue un indicador de reservas monetarias que se calcula con base en una metodología del Fondo Monetario Internacional (FMI), que, al 27 de octubre (último dato disponible), antes del ingreso de los eurobonos, se encontraba en 124,2% del valor mínimo adecuado, cuyo máximo es 150%.
González sugiere que la autoridad monetaria seguirá generando demanda para atender el exceso de oferta de divisas y suavizar el impacto de la mayor afluencia de dólares. Sin embargo, considera que las presiones a la baja pueden seguir influyendo en el precio.
Panorama para diciembre
Diciembre suele ser un mes con una importante entrada de divisas en Costa Rica debido a la temporada alta de turismo y las obligaciones laborales y empresariales, como el aguinaldo o el pago de impuestos. Este panorama llega justo en un año en el que la abundancia de dólares ha sido la tónica.
Durante este 2023, en el Banco Nacional, por ejemplo, han observado un aumento significativo en la entrada de dólares en ventanilla, con un promedio diario de divisas netas 50% mayor que en el 2022. Como consecuencia, las operaciones de la entidad en Monex experimentaron un aumento proporcional.
William Porras Bermúdez, economista de Ecoanálisis, añadió que en diciembre hay días que registran altas transacciones en el mercado cambiario, vinculadas al pago de aguinaldos, impuestos y algunas operaciones de inversión.
En el Banco de Costa Rica (BCR) prevén mayores presiones a la baja en el tipo de cambio y continuidad en la participación del Banco Central como comprador para evitar niveles aún más bajos. El impacto de un aumento estacional en la oferta de dólares dependerá de la participación del Banco Central como comprador en el Monex, según la entidad financiera.
Garita coincidió en que, en el contexto actual, donde se presenta una apreciación significativa del colón, es posible que los generadores de divisas hayan adelantado parte de sus ventas, lo que, sumado a la participación del Banco Central, podría hacer que la estacionalidad tenga menor incidencia respecto a años anteriores.
El analista de Mercado de Valores, por su parte, destacó que las presiones del mercado aún siguen hacia la baja; pero mientras el BCCR mantenga su demanda, el impacto podría ser paulatino y ordenado, sin necesariamente implicar una apreciación significativa del colón.
En relación con los compromisos de deuda del Gobierno Central, el subgerente general de Estrategia y Experiencia al Cliente del Banco Nacional afirma que la Tesorería Nacional ha venido realizando una gestión de activos y pasivos que busca tener un mejor calce de plazos y monedas, reduciendo así el riesgo de presiones en el mercado.