El Fondo Monetario Internacional (FMI) propuso al Banco Central de Costa Rica (BCCR) prepararse para “reducir aún más la tasa de política monetaria”, en las próximas reuniones de la Junta Directiva, como una alternativa de visión de futuro y consideró adecuadas las disminuciones realizadas a partir de marzo del 2023, cuando el indicador estaba en 9%, a un 4% en la que se ubica actualmente.
El organismo internacional señaló que el nivel actual de la tasa de política monetaria (TPM) sigue siendo moderadamente restrictivo, pese a que el balance de riesgos para la inflación se encuentra firmemente a la baja.
“El BCCR ha relajado adecuadamente su política monetaria, pero debería limitar su actividad en el mercado cambiario a responder a condiciones de mercado desordenadas”, argumentó el FMI en un comunicado de prensa sobre el informe Evaluación Posterior al Financiamiento con Costa Rica, publicado este lunes.
Durante la última reunión de política monetaria, el pasado 19 de diciembre, mantener la TPM en el 4%, nivel en que está desde el pasado 18 de octubre.
El órgano multilateral también recomendó al BCCR limitar su actuación en el mercado cambiario solo cuando hay condiciones desordenadas en el tipo de cambio. El ente emisor ejecuta, desde el tercer trimestre del 2022, una relevante intervención de compra de excesos de dólares en la economía costarricense.
Al 18 de diciembre, las reservas internacionales netas del BCCR alcanzaron un saldo de $14.063 millones, un nivel que el FMI calificó como “amplio” y cercano al óptimo recomendado ante riesgos de inestabilidad internacional.
“Se debería permitir que el tipo de cambio se ajuste de manera flexible a las condiciones del mercado (...) la inversión cambiaria frecuente puede obstaculizar el desarrollo del mercado cambiario y crear incentivos para la dolarización”, apuntó el Fondo respecto a las intervenciones del BCCR para reforzar sus reservas o adquirir divisas para el Sector Público No Financiero (SPNF).
En el informe se destaca que el SPNF debe gestionar sus propios riesgos cambiarios y reducir la dependencia del BCCR como intermediario para las transacciones cambiarias. Para el FMI instituciones como la Refinadora Costarricense de Petróleo o el Instituto Costarricense de Electricidad deberían adquirir directamente sus dólares en el mercado cambiario.
Menor crecimiento y alza en precios
El FMI prevé que la economía costarricense experimentará una desaceleración en su crecimiento en los próximos años. Para 2024, estima un aumento del producto interno bruto (PIB) del 4%, y que sea del 3,5% en 2025.
“El debilitamiento de la demanda externa debido a las sorpresas en el crecimiento mundial, el aumento del proteccionismo debido a la profundización de la fragmentación geopolítica y la oposición a las reformas en un entorno político fragmentado podrían reducir el crecimiento”, se recalca en el documento.
Estas proyecciones están ligeramente por debajo de las estimaciones del BCCR, que anticipa un crecimiento del PIB del 4,1% en 2024 y del 3,9% en 2025.
En cuanto a la inflación, el FMI proyecta un incremento en el nivel de precios para el próximo año, lo que situará al indicador cerca del 2% hacia la segunda mitad de 2025, en el límite inferior del rango meta del BCCR, establecido entre 2% y 4%.
Finalmente, el Fondo aconsejó aprobar las propuestas legales para reforzar la autonomía del BCCR y las mejoras en la gobernanza en la institución. Así como fortalecer la supervisión financiera y las enmiendas pendientes del marco de resolución bancaria y seguro de depósitos.