Uno de los datos que más impacta cuando hablamos de demografía es la tasa de mortalidad infantil. Este indicador muestra cuántos niños menores de un año fallecen por cada 1.000 nacidos en un año. Las diferencias alrededor del mundo son notables.
Un reciente informe de las Naciones Unidas y el Banco Mundial revela que, aunque las tasas globales de mortalidad infantil van bajando, detrás de esos promedios se esconden tendencias que siguen afectando a los niños más vulnerables.
El reporte, titulado Niveles y tendencias en Mortalidad Infantil 2023, publicado en marzo pasado, destaca que un niño nacido en el África subsahariana tiene, en promedio, 18 veces más probabilidades de morir antes de cumplir 5 años que uno nacido en Australia.
Según los datos presentados al 2022, Costa Rica tiene una de las tasas de mortalidad infantil más bajas en América Latina y el Caribe. Sin embargo, las estadísticas de la OCDE del mismo año lo colocan con el índice más alto entre los países miembros con información disponible.
En esta edición de La Dataserie, mostramos los países con las tasas de mortalidad infantil más altas y los que tienen los índices más bajos, basados en datos del Banco Mundial y la OCDE. También presentamos cómo se ha comportado este indicador en Costa Rica, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Cabe señalar que este indicador se vincula a la calidad del acceso a la salud y la atención en los servicios médicos de los países. Laura Solís, investigadora del Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) de la Universidad Nacional (UNA), destaca que en Costa Rica un servicio que garantiza la baja de este índice es la atención prenatal a las mujeres embarazadas.
Por su parte, Gilbert Brenes Camacho, investigador del Centro Centroamericano de Población (CCP) de la Universidad de Costa Rica (UCR), considera además que la tasa está directamente relacionada con los bajos índices de fecundidad en general y la disminución del embarazo adolescente.
¡Vámonos a los datos!
El reporte conjunto del Banco Mundial y las Naciones Unidas, coloca a Sierra Leona, país ubicado en el oeste de África, con el mayor índice en la tasa de mortalidad infantil, con 76 niños menores de un año por cada 1.000 nacidos. Le siguen la República Centroafricana (74), Nigeria (69), Somalia (69), Chad (64), Sudán del Sur (64), Guinea (62), Níger (60), República Democrática del Congo (60) y Malí (60), en los primeros 10 puestos. Todos son países de África.
En el caso de América Latina y el Caribe, la lista la encabeza Haití (44), la isla Dominica (31), República Dominicana (27), Guyana (22), Venezuela (21), Bolivia (20), Guatemala (19), Jamaica (16), Santa Lucía (16) y Paraguay con 15.
En el otro extremo, los 10 países con menores tasas de mortalidad infantil en el mundo son San Marino y Estonia con un niño fallecido por cada 1.000 nacimientos; Japón, Noruega, Singapur, Bielorrusia, Finlandia, Eslovenia, Islandia y Suecia, todos con una tasa de dos niños fallecidos.
Echando un vistazo a otra fuente, la publicación digital The World Factbook de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, muestra a Afganistán en el primer lugar con la mayor tasa de mortalidad infantil, con 124 niños fallecidos por cada 1.000 nacidos, según datos estimados a 2024. Le siguen Somalia (84) y la República Central Africana (81) entre un total de 227 países enlistados.
Los datos de Costa Rica
¿Y cómo están los datos en Costa Rica? Según las estadísticas conjuntas del Banco Mundial y las Naciones Unidas, en 2022 el país tenía una tasa de mortalidad infantil de siete niños por cada 1.000 nacidos vivos. Solo cuatro países en Latinoamérica y el Caribe tienen mejores cifras: Islas Turcas y Caicos, Chile, Uruguay y Cuba.
Por otro lado, el análisis de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) revela que, para ese mismo año, Costa Rica registraba 10 muertes infantiles por cada 1.000 nacidos vivos, lo que lo posiciona en el último lugar entre los 25 países del organismo que reportaron este dato.
La OCDE está formada por 38 países, la mayoría son economías desarrolladas. Solo cuatro países de América Latina son miembros: Chile, México, Colombia y Costa Rica.
Solís considera que Costa Rica sigue manteniendo bajas tasas de mortalidad infantil a nivel regional, pero en comparación con los países de la OCDE, hay áreas donde las estadísticas pueden mejorar. Esto se puede lograr a través de estudios impulsados por políticas públicas que identifiquen los factores necesarios para reducir aún más este índice.
En la última actualización de datos del INEC, al primer semestre de 2024, la tasa de mortalidad infantil en Costa Rica fue de 11 niños por cada 10.000 nacidos vivos, mientras que en el mismo periodo del año anterior fue de 9, según cifras preliminares.
A nivel de provincias, Limón registra la tasa más alta con 13 niños fallecidos, mientras que Heredia tiene la más baja, con 7.