Los costarricenses están comenzando a percibir una reducción en las tasas para ahorros y para créditos en colones, luego de la disminución en los réditos que paga el Gobierno en sus bonos y las bajas en la tasa de política monetaria aplicadas por el Banco Central.
Sobre este comportamiento llamó la atención el presidente del Banco Central, Rodrigo Cubero, en una exposición que realizó en un seminario de la firma Ecoanálisis, este 10 de diciembre.
Las tasas de interés se habían mantenido altas por la presión del Gobierno en el mercado debido a su urgencia para conseguir recursos que le permitieran cubrir los gastos que no puede financiar con impuestos.
Luego de la aprobación y vigencia de la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, en diciembre del 2018, y la captación de recursos externos (eurobonos), el Gobierno ha mermado dicha captación y también ha podido pagar menos por los recursos que pide prestados.
“Hemos visto caídas en tasas pasivas y activas; ya se están empezando a ver la baja en las tasas del Gobierno”, comentó Cubero.
El jerarca mostró un gráfico donde la tasa de interés promedio ponderado de la deuda interna del Gobierno ha pasado de cerca de 9,7%, en abril pasado, a 6,5% en octubre, debido a que las nuevas colocaciones tras la reforma fiscal se han realizado a menores costos.
Por su parte, la tasa de política monetaria, que es una tasa de referencia del Banco Central, pasó de 5,25%, en febrero del 2019, a 3,25% actualmente.
Las menores tasas de interés, así como la mayor disponibilidad de crédito confianza, comentó Cubero, están ayudando a que el crédito en colones crezca cerca de 3,2% para noviembre del 2019, respecto al mismo mes del año anterior.
Además de la baja en las tasas de interés, y el crecimiento del crédito, el jerarca señaló otros indicadores que muestran una recuperación.
Por ejemplo, tocaron fondo las importaciones de vehículos, cuando se ven las importaciones desagregadas por tipo de bien; las de consumo están rebotando y las exportaciones a Centroamérica mejoraron: en Nicaragua, donde el crecimiento de las ventas estaba en negativo, ya se encuentra cercano a cero.
Perspectivas 2020
Sobre las perspectivas 2020, Cubero explicó que las economías avanzadas seguirán presentando desaceleración y las emergentes tendrían un repunte que llevarían a que la economía mundial tenga un repunte en su conjunto.
Para los socios comerciales, que son aquellos países a los cuales Costa Rica les vende productos, hay un repunte en el crecimiento de su producción, desde el 2% en el 2019, a 2,1% en el 2020.
Durante el próximo año, el economista prevé una inflación por debajo del 3% y no se esperan efectos inflacionarios de segunda ronda del impuesto al valor agregado.
Añadió que hay presiones deflacionarias hacia abajo, lo cual da espacio para seguir reduciendo las tasas de interés del Banco Central, todavía más.
Sobre la proyección de crecimiento del 2020, se mantiene el 2,6% anunciado en julio hasta la próxima revisión del programa macroeconómico, que se realizará a inicios del próximo año.
Sobre el crecimiento de este año, Cubero dijo que tal vez no se alcance el aumento en la producción de 2,2% que se había previsto.
“Es posible que estemos por debajo del 2,2% en el 2019, no vemos que se vaya menos del 2%, tal vez no alcancemos el 2,2%, esperamos una recuperación moderada para el 2020”, comentó Cubero.
En el seminario, el expositor Luis Mesalles llamó la atención de que al ritmo de crecimiento actual, a Costa Rica le llevarían 36 años duplicar el ingreso disponible, y 13 años para alcanzar el ingreso disponible de Panamá, suponiendo que dicho ingreso no crezca en esos años.
En la actividad también expuso el ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, quien llamó la atención de retos que tiene el país en desigualdad y pobreza y su visión de país.
Chaves amplió sobre el plan Hacienda Digital en el bicentenario, que detalló en una entrevista con La Nación, en el cual se buscar invertir entre $40 millones y $50 millones por año, para modernizar el sistema informático de esta cartera.