Las reservas en dólares del Banco Central han aumentado en los últimos días ayudadas por el desembolso de un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y por las compras de divisas que realiza la autoridad monetaria en el mercado Monex, para reponer las que vende al sector público, entre los principales factores.
Entre el 21 de diciembre y el 16 de enero las reservas monetarias internacionales aumentaron en $425 millones hasta alcanzar $6.949 millones. Este monto está $1.160 millones por debajo de las que había el 6 de marzo del 2020 cuando se anunció el primer caso de la covid-19 en Costa Rica.
El 23 de diciembre pasado ingresaron $250 millones del Programa de Emergencia para el Fortalecimiento Fiscal y Restaurar el Crecimiento, del BID, lo cual contribuyó al incremento. Además, en diciembre hubo un alto superávit de divisas en el sector privado que surge de restar las ventas a las compras de divisas que hacen las entidades financieras al público.
En diciembre, dicho superávit fue de $435 millones y en los primeros 12 días de enero, de $94,7 millones lo que refleja en parte la recuperación del turismo, así como el incremento en las exportaciones. Entre enero y noviembre del 2021 el promedio de este superávit fue de $185 millones.
El Banco Central ha aprovechado la coyuntura para comprar divisas en el mercado Monex. Para evitar fluctuaciones violentas en el tipo de cambio la entidad vende (o compra) las divisas que el sector público requiere, y luego las adquiere (o vende) en el Monex.
Entre febrero y diciembre del 2021, las ventas netas al sector público que hizo el Banco Central superaron sus compras netas en el Monex; no obstante, en los primeros días de enero las compras netas de divisas en el Monex superaron a las ventas en $100 millones.
La empresa Consejeros Económicos y Financieros (Cefsa) calcula otro indicador de reservas al que le llama “reservas propias”, que le resta los depósitos por encajes (15% de las captaciones en dólares que las entidades deben reservar en el Banco Central) y los depósitos del Gobierno en dólares. Ninguno de estos rubros se pueden “utilizar” propiamente para operaciones cambiarias ya que son encajes y depósitos. Según este indicador, al 3 de enero las reservas eran de $3.101 millones.
En el acuerdo del país con el Fondo Monetario Internacional también se definen límites de reservas con base en la metodología del organismo.
Según el convenio, al finalizar diciembre del 2021 el piso de reservas monetarias que debía tener el país eran $3.768 millones. Se consultó al Banco Central si se cumplió con dicho piso. La entidad respondió que todavía no se ha realizado la valoración por parte del organismo.
“Efectivamente el convenio con el FMI definió un valor meta para las denominadas ‘RIN del Programa’ (...) Esta metodología de cálculo, además, establece ajustes posibles en el valor de esa meta por desvíos en determinados rubros en relación con lo programado al momento de formularse y acordarse las metas”, respondió el Banco Central.
“Estos ajustes son valorados por los equipos del FMI y el Banco Central, valoración que para diciembre del 2021 no se ha realizado. Al respecto, cabe recordar que la comunicación oficial sobre el estado de cumplimiento de la meta para las ‘RIN del Programa’ corresponde al FMI. Esta valoración será considerada en la segunda revisión del seguimiento de este convenio”, añadió la entidad.
¿Por qué es importante?
El nivel de reservas es importante porque son los recursos que el país tiene para hacer frente a cambios bruscos externos como los incrementos en el precio del petróleo y sirven también al Banco Central para intervenir en el mercado cambiario para evitar fluctuaciones violentas.
Para Daniel Ortiz, director de Cefsa, la posición de reservas cada vez menor durante la pandemia ha aumentado las vulnerabilidades para la economía nacional, en particular ante shocks externos.
Las reservas han sufrido por la caída de las divisas que ingresaban por turismo las cuales pasaron de casi $4.000 millones, en el 2019 a $1.328 millones, en el 2020, y a $1.076 millones en los primeros tres trimestres del 2021. También resultaron afectadas por el incremento en los precios internacionales de las materias primas.
Para los próximos meses, añadió Ortiz, hay elementos que pueden ayudar a que haya una mayor oferta de divisas, por ejemplo el turismo, mayores exportaciones de bienes y una mayor inversión extranjera directa. Pero también hay elementos que presionarán por el lado de la demanda. Entre ellos, los vencimientos de deuda pública en dólares, las necesidades del sector público no bancario, las inversiones de las operadoras de pensiones complementarias en el exterior y un aumento en las importaciones.
El ministro de Hacienda, Elian Villegas, informó, además, de que para la segunda quincena de febrero esperan el desembolso de otros $250 millones de otro préstamo del BID ya aprobado.