El déficit fiscal del Gobierno Central fue equivalente al 0,7% de la producción de Costa Rica durante el primer cuatrimestre de este año. Esto representó un valor absoluto de ¢319.185 millones, y es el dato más bajo desde el 2009.
El resultado del 2023 significó una leve baja comparado con el mismo periodo del 2022, cuando el desajuste financiero fue de 0,8% del producto interno bruto (PIB), es decir, ¢358.318 millones, informó este miércoles el Ministerio de Hacienda, en un comunicado de prensa.
En la información difundida se explica que la mejora en los resultados fiscales se dio por una combinación de contención en el gasto ordinario del Gobierno, sin incluir el pago de intereses de la deuda, y de un incremento en los ingresos.
De hecho, la recaudación tributaria fue equivalente al 4,8% del PIB en los primeros cuatro meses de este año, monto que significó ¢2.246.768 millones en términos absolutos. Al compararlo con el mismo periodo del 2022, el ingresos por pago de impuestos fue de ¢2.113.038 millones, es decir, el 4,8% del PIB.
Los datos difundidos muestran que, en el primer cuatrimestre, el Gobierno tuvo un superávit primario de ¢491.160 millones, es decir, el 1% de la producción. Mientras que, en el mismo periodo del 2022, fue de ¢390.192 millones, equivalente a 0,9% del PIB.
“Hemos venido accionando para mejorar las cifras fiscales que mostramos cada mes, lo que se traduce en una mayor estabilidad de las finanzas públicas”, comentó Nogui Acosta, ministro de Hacienda.
Acosta añadió que la emisión de eurobonos por $1.500 millones tuvo un efecto positivo en el flujo de caja del Gobierno. Este dinero se utilizará durante este año para pagar la deuda.
El saldo total de endeudamiento del Poder Ejecutivo a abril pasado ascendió a ¢28.518.291 millones, lo que equivale al 60,9% de la producción. Esto representa una disminución de 2,9 puntos porcentuales en comparación con el cierre del 2022, cuando la deuda (interna y externa) alcanzó el 63,8% del PIB.
La institución detalló que las obligaciones en el pago del servicio de la deuda (amortización del principal e intereses) para el resto de este año y hasta el 2028 ascienden a ¢5.114.585 millones. Este monto equivale al 18% del saldo total de la deuda registrado hasta abril pasado.
Desglose de cifras fiscales
El tributo sobre la renta y el impuesto sobre el valor agregado (IVA) fueron las dos cargas impositivas que más dinero generaron al Gobierno, entre enero y abril de este año, pues en su conjunto significaron el 68% de los ingresos totales.
El impuesto sobre la renta ascendió, en el primer cuatrimestre del 2023, a ¢904.756 millones lo que significó 1,9% del PIB. En el mismo periodo del año pasado, el monto fue de ¢871.378 millones, equivalente a 2% de la producción.
Las empresas aportaron este año la mayoría del pago de este tributo sobre sus utilidades con ¢576.545 millones; las personas físicas, con ¢250.571 millones; y las remesas al exterior, fueron ¢77.640 millones, según los datos difundidos por Hacienda.
En el caso del IVA, el saldo de recaudación hasta abril fue de ¢782.425 millones, o 1,7% de la producción. Mientras que, en el periodo del 2022, fue de ¢711.573 millones, equivalente a 1,6% del PIB.
El impuesto a los combustibles fue el tercer tributo en relevancia para la Hacienda Pública, en el primer cuatrimestre, con una recaudación de ¢178.653 millones, es decir, 0,4% del PIB. En términos absolutos, hubo una disminución porque, en el 2022, el ingreso fue de ¢198.929 millones.
Hacienda atribuyó la reducción en la recaudación en que hubo un menor consumo de litros de gasolina súper y regular.
El gasto total fue de ¢2.824.129 millones, el equivalente al 6% del PIB, durante el primer cuatrimestre de este año. Mientras que, en el mismo periodo del 2022, fueron ¢¢2.754.069 millones, o sea, el 6,2% de la producción.
Hacienda detalló que los principales egresos, en los primeros cuatro meses de este año, fueron las remuneraciones, con ¢940.281 millones; transferencias corrientes, con ¢858.504 millones; y gasto en inversión, con ¢132.877 millones.
En tanto que, el gasto por el pago de intereses de la deuda fue de ¢810.345 millones, el equivalente a 1,7% del PIB, y fue el más alto de los últimos 18 años en términos absolutos. El año pasado, en el mismo periodo, el egreso fue de ¢748.511 millones, también el 1,7% de la producción.