EscucharLa economía de Costa Rica experimentó un crecimiento más lento en marzo pasado, con una tasa de variación interanual del 4,8% en el índice mensual de actividad económica (IMAE). Este resultado representa una desaceleración en comparación con el 6,5% registrado en el mismo mes del año 2022.
Según el informe publicado por el Banco Central de Costa Rica (BCCR), este viernes pasado, esta leve reducción se atribuye principalmente a un menor ritmo de crecimiento en el sector de servicios de investigación y desarrollo de las empresas de zona franca, aunque se mantiene como el sector con el crecimiento más relevante.
En marzo la actividad de las multinacionales instaladas en zona franca aumentó 21,1%, pero significó una reducción frente al impulso registrado en los meses previos. Por ejemplo, en febrero, crecieron un 25,8%, según el BCCR.
En general, el crecimiento promedio de la actividad económica en el primer trimestre de 2023 fue del 4,6%, según detalló la entidad
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El informe también destaca un crecimiento del 1,8% en la actividad económica de las empresas bajo régimen definitivo (aquellas que pagan impuesto sobre la renta) en marzo, en contraste con el 6,2% registrado en el mismo mes del año pasado.
El Banco Central destacó que el crecimiento se fundamentó en las actividades ligadas al turismo como agencias de viajes, hoteles y restaurantes. También destacaron los servicios de publicidad y contabilidad y los servicios informáticos.
Asimismo señala la baja en la producción de las actividades de manufactura (-1,5 %) y de la construcción (-0,8 %).
Construcción a la baja
Respecto al comportamiento sectorial, el BCCR señala que el crecimiento interanual en marzo 2023 se concentró en la manufactura, servicios profesionales y administrativos, además de los servicios de información y comunicación. En el otro lado, refiere caídas en la construcción y la administración pública.
En el caso de la actividad agropecuaria, que refleja un crecimiento de 0,7%, con este resultado acumula cuatro meses de comportamiento positivo, luego de las caídas sucesivas durante 2022.
Esta “leve” recuperación, como la califica la entidad, es producto de condiciones climáticas estables y la estabilización de precios en algunos productos importados.
La manufactura por su parte mostró un crecimiento del 7,5% producto de la persistente demanda externa por productos manufacturados en las zonas francas, logrando el aumento del 22,6 %, entre tanto, las empresas del régimen definitivo reflejaron una contracción de -1,5%.
En la manufactura adscrita a los regímenes especiales, el BCCR destaca el alza en las ventas al exterior de implementos médicos como válvulas cardiacas y catéteres, además señala la caída en los productos textiles y en la producción de productos alimenticios diversos que mantiene tasas negativas desde abril del 2022.
En cuanto al régimen definitivo, mostró caídas en la producción en casi la totalidad de sus industrias. “La menor actividad de la construcción incidió en el recorte de la producción de otras industrias manufactureras, específicamente los productos de hierro y acero, hormigón, cemento y pintura”, señala el reporte.
En tanto, la caída de -1,9% en la producción de alimentos obedece a la menor producción de azúcar, productos de panadería, aceites y la producción de sustancias químicas como alcohol, fertilizantes y abonos.
El sector construcción cayó -0,8 %, respecto al mismo mes de 2022. “Esta industria enfrenta mayores costos de producción debido a las alzas internacionales en los precios del hierro y acero, dado que Ucrania es uno de los mayores proveedores de estos insumos en el mundo”, indica el BCCR.
Añade que la construcción con destino privado cayó 1,8% debido a la menor actividad no residencial en el segmento de edificios, naves industriales y bodegas.
La construcción con destino público muestra un leve crecimiento de 0,2 % debido a las obras ejecutadas por parte del Consejo Nacional de Vialidad, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Ruta 32 y del Programa de Infraestructura de Transporte (PIT).
Por su parte, la actividad de comercio y reparación de vehículos creció 1,0 % originado por el crecimiento del 17,4% en la venta de vehículos y de 9,5% en la reparación de los mismos. Mientras que la comercialización de aparatos eléctricos del hogar y las ventas de materiales de construcción reflejaron caídas de -2,1% y -5,9%, respectivamente.
Por su parte, la actividad de servicios creció 4,7 % principalmente por los servicios profesionales y de desarrollo y consultoría informática, además del crecimiento en los servicios de publicidad y contabilidad en el régimen definitivo, así como los servicios de agencias de viajes y en el segmento de alojamiento y restaurantes, motivado por la recuperación del turismo.
Según el BCCR, el ingreso de turistas creció 33,7 % de manera interanual en el primer trimestre del 2023 y, alcanzó un 84% del nivel correspondiente al mismo periodo del 2019, anterior a la emergencia provocada por la pandemia de covid-19.
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Las actividades ligadas al turismo dieron el principal impulso a las empresas del régimen definitivo (aquellas que pagan impuesto sobre la renta) en marzo pasado, reportó el Banco Central de Costa Rica.
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