EscucharLa aspiración de muchas familias de tener su propia casa en algún momento de sus vidas es una realidad para un total de 1.184.731 hogares costarricenses. De este grupo, el 13,45% todavía está pagando el préstamo, lo que equivale a 159.323 hogares; mientras que el 86,55% restante (1.025.408 familias) ya canceló la deuda.
Así lo concluyó la primera edición de la Encuesta Financiera a Hogares, publicada este 18 de mayo por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). Este estudio ahonda en la situación financiera de los costarricenses al publicar datos sobre la tenencia, composición y valor de los principales activos y pasivos de los hogares.
Dicha encuesta se aplicó a 5.424 personas mayores de 18 años, distribuidas en 2.321 hogares, entre el 28 de febrero y el 10 de junio del 2022; y también concluye que el 32% restante, correspondiente a 557.163 familias, habitan en una vivienda alquilada o prestada.
En términos generales, el 90,3% de los hogares posee algún activo, siendo el más importante la vivienda en la que residen, aunque el documento también contabiliza otros activos reales y financieros. Por ejemplo, el 48,9% de las viviendas poseen algún vehículo, cuyo valor promedio es de ¢6,12 millones.
Mitad de los hogares están endeudados
Según indicó el INEC, casi la mitad de los hogares (49,6%) poseen algún tipo de deuda; lo que hace que al menos el 26% de los hogares costarricenses destinen más del 30% de sus ingresos mensuales para cumplir con este tipo de pagos.
De todas las familias, el 11,4% tienen deudas hipotecarias y el 44,6% no hipotecarias, las cuales abarcan créditos personales otorgados por entidades financieras, o préstamos brindados por individuos o instituciones de empeño o comerciales.
El tipo de deuda que más pesa para las familias es el crédito de vivienda, que representa el 46,1% del total del monto de crédito de los hogares.
La importancia relativa del préstamo de vivienda equivale a que son deudas mucho más cuantiosas que el resto de deudas investigadas. En promedio, el saldo de deuda por vivienda es de casi ¢25,2 millones de colones y la mediana se estima en ¢16 millones.
Por su parte, las deudas de tarjetas de crédito afectan a una gran minoría de las familias del país. Aunque un 20,6% de los hogares utilizan este tipo de producto, la mayoría de los hogares realizan pagos de contado mensuales, por lo que no se consideran como deudas.
Solo el 5,9% de los hogares tienen personas que no realizaron pago de contado el periodo anterior y mantienen saldos pendientes de pagar en más de un periodo.
