La que en el año 2000 fue la segunda región más pobre del país, la Chorotega (principalmente Guanacaste), hoy es la segunda menos pobre.
Por su parte, la Región Brunca (incluye Pérez Zeledón, Buenos Aires y Golfito, entre otros), que albergaba a los hogares con mayores necesidades en el 2010, fue sustituida por la Pacífico Central (especialmente Puntarenas).
Es así como en siete años, en los cuales son comparables los datos de las Encuestas Nacionales de Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), el mapa de la pobreza en Costa Rica ha variado.
En los extremos del país (la Región Chorotega y Brunca) la pobreza se alivió, pero en la costa pacífica y en la Región Huetar Norte (incluye San Carlos, Los Chiles, Puerto Viejo) hay un deterioro.
Los cambios más dramáticos se dieron entre el 2014 y el 2017 cuando el porcentaje de hogares pobres bajó casi 11 puntos en la Región Chorotega y casi 7 puntos en la Brunca.
Pablo Sauma, director del Observatorio del Desarrollo de la Universidad de Costa Rica, elaboró una serie más larga de pobreza en la Región Chorotega enlazando series de diferentes encuestas y encontró que la reducción de la pobreza en esta región es un fenómeno de largo plazo.
“El proceso de reducción de la pobreza se inició desde la primera parte de los años noventa, y fue bastante sostenido hasta la crisis del 2008, en que aumentó y se mantuvo alta por varios años y comenzó a bajar nuevamente a partir del 2015”, comentó Sauma.
Según esta serie, a inicios de los años 90, en la Región Chorotega, casi la mitad de los hogares eran pobres; 27 años después son la quinta parte de los hogares los que se encuentran en dicha condición.
¿Qué pasó en la Chorotega y la Brunca?
Según las consultas realizas a Sauma, a Natalia Morales, coordinadora del capítulo social del Estado de La Nación, y a Emilio Arias, presidente del Instituto Mixto de Ayuda de Social (IMAS), hay al menos tres factores que han influido en la región Chorotega: el cambio económico que impacta el mercado laboral de la región, la inversión pública y la ayuda estatal.
“Mi argumento personal es que la reducción de la pobreza en esa región está directamente relacionada con la actividad económica propiamente, impulsada por la gran diversificación productiva tanto en la parte agropecuaria y agroindustrial, como en otras actividades secundarias (actividades industriales, generación eléctrica, etc.), así como los servicios, que van más allá de los dedicados al turismo, pues incluye educación, servicios médicos, servicios profesionales de todo tipo, educación, etc.”, comentó Sauma.
En 1984, según el censo de ese año, el 53% de la población de esa región trabajaba en labores primarias (agricultura y ganadería, por ejemplo). En el censo del 2011 el 65% de la población laboraba en servicios.
Pilar Ramos, coordinadora del área de Divulgación Estadística del Instituto Nacional de Estadística y Censos, añadió que puede haber también una migración de profesionales hacia esa provincia y que llegan a elevar el ingreso promedio de los hogares.
Morales, por su parte, llamó la atención en el crecimiento de la urbanización en Guanacaste, la cual se ha facilitado por la inversión pública en la región con la ampliación del proyecto de riego, la nueva carretera Cañas Libera y las mejoras en el aeropuerto de Liberia.
“Están recibiendo más inversión, tanto pública como por turismo, y eso pareciera que está teniendo un impacto importante en esa región”, comentó Morales
También a la Región Chorotega le ha llegado la ayuda estatal. Según información suministrada por el IMAS, el beneficio aumentó fuertemente entre el 2010 y el 2016 al pasar de casi ¢80.000 millones a ¢115.000 millones, un incremento de 45%. En la región Chorotega fue donde más creció dicha ayuda estatal entre los años 2010 y 2016 (subió un 128%).
Otro factor, que añadió Arias, es que en Guanacaste también se aplicó un plan piloto mediante el cual, en una alianza entre el sector público y privado, se ha capacitado a las personas para que puedan trabajar en los empleos que están ofreciendo las empresas.
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Por ejemplo, si las empresas demandan personal que hable inglés, entonces el sector público ofrece opciones a la población para aprender esta lengua
En la Región Brunca, la pobreza había subido bastante hasta el 2014, pero a partir de ahí comenzó a bajar, aunque sigue siendo una de las que tiene los hogares más necesitados del país.
Para Sauma, es posible que las transferencias monetarias de los programas asistenciales estén jugando un papel clave en los últimos años en la Región Brunca. No obstante, explicó que es una región que ha enfrentado volatilidad en los resultados y entonces lo que ha sucedido en los últimos cuatro años es poco tiempo para garantizar que la reducción sea realmente sostenida.
Morales también considera que una hipótesis para la reducción de la pobreza en la Región Brunca es que se debe a la política social, pues tampoco se observa una mejora sustancial del empleo o un cambio en el corto plazo en las actividades productivas de la región.
Según información suministrada por el IMAS en la Región Brunca también ha aumentado en forma importante la ayuda estatal entre el 2010 y el 2016 (75%).
La ayuda estatal que da el IMAS incluye, por ejemplo, atención a familias (necesidades básicas), cuido y desarrollo infantil, Avancemos (transferencia monetaria condicionada), capacitación, emprendimientos productivos, mejoramiento de vivienda y ayuda a hogares con personas con discapacidad, entre otros.
Arias explicó que la ayuda estatal no solo aumentó, sino que se está priorizando en los quintiles de mayor pobreza en el país y eso se refleja en los resultados de las encuestas.
En la caso de la Región Pacífico Central, que también tiene zonas turísticas, se convirtió en el 2017 en la más pobre del país.
“Cada zona tiene sus propias particularidades. Hay que ver también el tema de las emergencias y la afectación de las emergencias naturales en cada zona. Otro tema es la infraestructura que tiene la zona para poder aplicarle este nivel de estrategia (plan piloto de capacitación para empleos), los niveles de hotelería y el crecimiento de la hotelería y el turismo en Guanacaste son muy distintos a las que tenemos en la Pacífico Central”, comentó Arias.
En esta región, también ha aumentado la ayuda estatal, pero eso no parece ser suficiente. Según la información proporcionada por el IMAS, en Puntarenas, la ayuda estatal tuvo un crecimiento de 61% entre el 2010 y el 2016.
Arias reconoció que si bien se han obtenido resultados positivos en algunas regiones, el déficit fiscal (exceso de gastos sobre los ingresos del Gobierno) constituye una amenaza para los logros, porque atenta contra mantener la ayuda estatal y la inversión pública así como también contra el crecimiento económico debido a la presión que ejerce sobre las tasas de interés.