Costa Rica tiene décadas de mantener una tendencia creciente en su población. Hasta 2022, año de la última estimación, el país tenía 5.104.907 habitantes, y para 2024 se proyecta que la población será de 5.164.860 personas.
Sin embargo, Costa Rica está cada vez más cerca de revertir esa dinámica. Este escenario podría presentarse en unos 21 años, cuando se prevé que la población del país deje de crecer, según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Esto ocurre cuando el número de los nacimientos es menor que el de defunciones, lo que provoca que la población del país deje de crecer y, por el contrario, empiece a reducirse. En Costa Rica, varios indicadores demográficos demuestran que la fecundidad sigue en disminución, lo que refuerza la idea de que el país está envejeciendo.
En esta edición de La Dataserie, nos concentramos en la tasa de fecundidad, utilizando como base los datos más recientes sobre las Estimaciones y proyecciones nacionales de población 1950-2100, publicados por el INEC en julio de este año. Para establecer la tasa mundial se usó información del Banco Mundial.
Según INEC, la tasa de fecundidad hace referencia al número de hijos que, en promedio, tendría cada mujer al final de su periodo fértil, si durante su vida tiene hijos de acuerdo con las tasas de fecundidad por edad observadas en el país y año de interés.
El indicador usualmente se compara con la tasa de reemplazo, que sirve para determinar si las parejas están teniendo la cantidad de hijos necesarios para poder reemplazarse a sí mismos.
Gilbert Brenes Camacho, investigador del Centro Centroamericano de Población (CCP) de la Universidad de Costa Rica (UCR), explicó que la tasa de reemplazo es muy estable y se sitúa en 2,1 hijos por cada mujer.
Cuando la tasa de fecundidad de un país es de 2,1 hijos por mujer, se encuentra en el nivel de reemplazo, es decir, las parejas están teniendo únicamente el número de hijos necesarios para reemplazarse a ellos mismos.
Baja fecundidad
Al observar los datos, es innegable que la fecundidad en Costa Rica atraviesa una baja considerable que se ha intensificado con el paso del tiempo. El último año en que el país estuvo por encima de la tasa de reemplazo fue en 2003.
La tasa global de fecundidad bajó de 3,26 hijos por mujer en 1990 hasta 1,23 para la proyección de 2024. Según el INEC, esta disminuirá aún más, ya que se proyecta que Costa Rica alcanzará una tasa mínima de 1,14 hijos por mujer en 2031.
La fecundidad en Costa Rica está muy por debajo del promedio mundial registrado en 2022 (2,26 hijos por mujer) por el Banco Mundial, así como de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (1,58 hijos por mujer).
El investigador del CCP afirmó que estar por debajo de la tasa de reemplazo no suele tener efectos a corto plazo, pero sí a mediano y largo. “Si una sociedad se mantiene en la tasa de 2,1 hijos por mujer, más o menos en el tiempo en que dura una generación en reemplazarse, la población no va a crecer ni a decrecer, se mantendría igual”, dijo.
Brenes manifestó que en los últimos seis años se aceleró el descenso en la fecundidad en Costa Rica, lo que significa que los nacimientos disminuirán mucho más rápido de lo previsto.
En un artículo de opinión publicado en abril de este año, Marco Otoya, académico del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (Cinpe) de la Universidad Nacional (UNA), señaló diversos factores que contribuyen a la disminución del número de nacimientos.
Entre ellos, el retraso de la maternidad, la disponibilidad de tiempo y las dificultades para conciliar la vida laboral con la familiar, los gastos asociados con la crianza de los hijos e hijas y el hecho de optar por no tenerlos.
A futuro, esto tiene implicaciones para la economía. Según el demógrafo, habrá una menor población de menos de 18 años, lo que incide en la cantidad de bienes y servicios que demandan las personas de menor edad. Por ejemplo, servicios de educación o salud infantil.
También afecta la fuerza de trabajo, ya que este indicador incluye a personas de 15 años o más. “Lo que se esperaría es que haya menos presión de la gente joven en la búsqueda de trabajo. En el mercado laboral, las empresas e instituciones tendrán más dificultades para encontrar personas jóvenes”, comentó.
Brenes Camacho, por su parte, resaltó que, en estos momentos, la tasa de fecundidad de Costa Rica es una de las más bajas en todo el mundo, similar a países como China, Japón o Vietnam.
De acuerdo con los datos del Banco Mundial, con corte a 2022, solamente 13 países y las regiones administrativas especiales de Hong Kong y Macao tuvieron una fecundidad menor a la de Costa Rica para ese mismo año en todo el mundo. De ellos, solo tres se ubicaron por debajo de 1 hijo por cada mujer.