Inscribirse como contribuyente ante el Ministerio de Hacienda es un proceso que se puede hacer en pocos pasos y de manera 100% remota, por medio de la plataforma Administración Tributaria Virtual (ATV). Sin embargo, una vez registrado en el sistema, existen varios cuidados que debe tener para evitar sanciones.
Para hacer la inscripción, la persona física debe crear un usuario en ATV para lo cual necesitará el documento de identificación vigente, ya sea la cédula de identificación, el Documento de Identidad Migratorio para Extranjeros (Dimex) en el caso de extranjeros residentes, o bien, el Número de Identificación Tributario Especial (NITE) para extranjeros no residentes.
Alberto Porras, socio de la firma de impuestos Baker Tilly Costa Rica, explicó que el NITE debe ser solicitado de forma presencial ante la Administración Tributaria o bien, por medio de la plataforma de trámite virtual de Hacienda, Travi.
Para acceder al sistema también se deberá crear una contraseña de acceso y luego se generará una Tarjeta Inteligente Virtual (TIV), que se utilizará cada vez que se desee ingresar a la plataforma.
Una vez dentro del sistema ATV, se cuenta con una opción para realizar el proceso de inscripción como contribuyente en la sección Registro Único Tributario. Para esto se deberá tener información personal y de la actividad económica a mano.
Dentro de los datos que se solicitan se encuentra el domicilio de la persona, teléfono, correo electrónico, indicación de la actividad económica que desarrolla, método de facturación, entre otros. Durante el proceso, también deberá brindar el número de medidor del domicilio fiscal del contribuyente, responsable o declarante.
Por su parte, Felipe Bonilla, sénior de Impuestos de la firma Grant Thornton, explicó que cualquier persona que desempeñe una actividad económica debe inscribirse como contribuyente de impuestos.
“Deberían inscribirse las personas que brinden servicios profesionales por cuenta propia, las personas que tengan sus despachos contables, despachos de temas laborales, financieros, las personas que venden repostería, los que venden frutas, y en general, cualquiera que realice una actividad económica a título personal”, explicó Bonilla.
El experto agregó a su explicación que la presentación de las declaraciones de impuestos también se realizan de forma 100% virtual por medio del sistema ATV.
Dentro de la plataforma se encuentra un listado de todas las posibles declaraciones que puede presentar el contribuyente. Y así, una vez presentada la declaración, el pago del impuesto se puede realizar a través de los servicios de conectividad bancaria (en línea) en las distintas entidades financieras. También se puede hacer el pago de forma física en las cajas de las entidades financieras autorizadas.
ATV fue uno de los sistemas afectados por el hackeo que sufrió el Ministerio de Hacienda en abril de este año, por lo que dejó de funcionar por al menos dos meses. Actualmente, opera con normalidad.
Mantenerse atento
Una vez inscrito ante Hacienda es cuando viene el trabajo de mayor cuidado, principalmente con el cumplimiento de las fechas para las declaraciones de impuestos, porque eventuales atrasos pueden significar multas de hasta medio salario base por declaratoria.
En relación con las fechas de presentación, el Ministerio de Hacienda tiene a disposición un calendario tributario para poder tener un mejor control de dichas obligaciones. Los contribuyentes pueden conocer su situación tributaria en la página web del Ministerio de Hacienda, ya sea digitando su número de cédula o su nombre completo.
Asimismo, como parte del quehacer tributario, el contribuyente necesitará de un sistema de facturación, ya sea el que ofrece el Ministerio de Hacienda o bien algún software independiente. Sobre el primero, Porras, de Baker Tilly advirtió de que los datos se deben estar descargando, pues los almacena únicamente dos meses y es necesario mantener la información por cinco años.
Por último, como parte de los cuidados, la Tarjeta Inteligente Virtual debe almacenarse en un lugar seguro, ya que posee algunos códigos que el sistema solicitará al contribuyente cada vez que desee iniciar la sesión.