Los altos costos de formalización y el difícil acceso al crédito se posicionan como los principales obstáculos que enfrentan las mujeres de Costa Rica y países vecinos para emprender, según los resultados del estudio Empresariedad Femenina en la Región Centroamericana, presentado este martes 10 de mayo por el Centro Latinoamericano de Innovación y Emprendimiento (Celiem).
Entre la opinión de 630 mujeres empresarias o emprendedoras, el 45% aseguró que el costo de la tramitomanía es parte de las mayores dificultades que enfrentan en el camino de montar sus empresas mientras que el 42% mencionó las pocas oportunidades para obtener opciones de financiamiento.
Sobre el último punto, el 52% de las encuestadas expresó que no existen condiciones de igualdad en el acceso al financiamiento y más del 60% financian sus actividades empresariales con recursos propios.
Asimismo, entre las limitaciones también influyen factores familiares y personales, puesto que el 33% mencionó la recarga de las responsabilidades de la vida familiar como una dificultad para emprender, mientras que el 31% aceptó que entra en juego el miedo a fracasar.
“Este I Monitor nos permite reflejar la importancia que reviste la especialización y sensibilidad de género en los procesos de acompañamiento, instrumentos financieros y programas de apoyo que comprendan la realidad y características de las mujeres emprendedoras para lograr efectividad en el empoderamiento de las mujeres en el liderazgo empresarial”, comentó Luis Álvarez, director ejecutivo de Celiem.
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La investigación también halló que la orientación emprendedora de las mujeres de la región está delimitada por su aspiración de mayores oportunidades de ingresos, pero que el peso del cuido y la responsabilidad familiar representan un factor determinante para su crecimiento empresarial. El 24% de las mujeres destina la totalidad de ingresos para gastos del hogar y 33% utiliza la mitad de sus ingresos para ese rubro.
“Pudimos constatar que aún con las particularidades que tiene la región, no existen diferencias sustanciales en los ecosistemas de los países y tenemos los mismos desafíos y tareas pendientes aún y cuando se hayan impulsado más o menos programas orientados a la empresariedad femenina”, destacó Álvarez.
Equidad y participación
Al igual que se ha reportado en monitores anteriores realizados por Celiem, las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) de mujeres cuentan mayoritariamente con participación femenina en su fuerza laboral. Un 63% de las encuestadas mencionó que entre un 40% y 100% de los cargos administrativos en sus empresas son ocupados por mujeres.
No obstante, a nivel de cargos directivos, aún cuando un 64% de las mujeres indicó ser propietarias de sus empresas, solamente el 53% de ellas ocupan la presidencia de la Junta Directiva de su negocio. Asimismo, otro hallazgo relevante a nivel de liderazgo es que aproximadamente el 40% de las mipymes lideradas por mujeres no tiene participación en organizaciones empresariales como cámaras o asociaciones.
Por otro lado, el 90% de las mipymes que participaron del estudio han impulsado mecanismos de buenas prácticas para lograr la equidad de género.
De acuerdo con los resultados, los principales instrumentos utilizados por las empresarias al momento de aplicar buenas prácticas son el impulso de un ambiente de trabajo de respeto mutuo entre hombres y mujeres (53%), lograr igualdad de oportunidades en el acceso a la formación y capacitación (47%), la búsqueda de la igualdad salarial y el acceso a puestos de decisión (ambos con 46%).
La encuesta se llevó a cabo del 22 de febrero al 1°. de abril, vía correo electrónico. Fue enviada a una base de datos de más de 20.000 contactos mipymes, en su mayoría de Costa Rica, seguido de República Dominicana y el resto de la región.