Las microempresas de los hogares generaron 768.258 empleos durante el 2017, el 72,1% de estos puestos fueron permanentes y el 27,9% ocasionales.
![](https://www.nacion.com/resizer/VTVEwsUG7-UhAy13kd_OvUlS55U=/1440x0/filters:format(jpg):quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gruponacion/VDGR7E3BINHFBBWTBPC26D3JTE.jpg)
Un grupo de mujeres de Los Diques, en Cartago, reciben capacitaciones para montar sus negocios relacionados a la industria alimenticia. (Imagen con fines ilustrativos). (Cortesía Laboratorios Stein)
Los resultados surgen de la Encuesta Nacional de Microempresas de los Hogares (Enameh), del 2017, publicados la mañana de este jueves 22 de febrero por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
La cantidad de microempresas de los hogares creció un 12,6% en dos años, al pasar de 371.000 emprendimientos en el 2015, a 418.000, en el 2017.
El estudio del INEC considera una microempresa del hogar cuando se cumplen tres criterios: no está inscrita como persona jurídica, no cuenta con contabilidad formal y el propietario no tiene salario fijo asignado.
La Enameh muestra que la mayoría de microempresas de los hogares son encabezadas por hombres (63,3%), mientras que las mujeres comandan el 36,7% de los emprendimientos de este tipo.
"(...) la mayoría de las personas (que trabaja en este tipo de unidades productivas) poseen una baja escolaridad, solo tienen primaria completa o menos el 48,2%, mientras que un 14,7% cuenta con secundaria completa y un 17,0% posee educación superior", señala el comunicado del INEC.
Entre las características de quienes dirigen microempresas desde sus hogares destaca que siete de cada 10 tienen edades entre 35 y 64 años.
Emprendedores solitarios apuntan a servicios
El 69,2% de quienes tienen una microempresa en su hogar trabajan solos y por cuenta propia, y apuestan, principalmente, a actividades económicas relacionadas con servicios.
La encuesta detalló que el 42,2% de este tipo de microempresas se dedican a servicios de comidas, tratamientos de belleza, transporte, jardinería o trabajos ocasionales, también conocidos como "chambas".
Mientras que el 22,6% desarrolla actividades un poco más especializadas que se relacionan con la industria, confección de ropa, panadería o construcción.
El 20,9% se especializa en procesos agropecuarios como el cultivo de café, plátano, frijol, o bien, la cría de ganado, pesca artesanal u otras.
En cuanto al tamaño de las microempresas, la mayoría se caratcerizan por ser unipersonales. En el 2017 se estimó que 289.224 personas (el 69,2%) estaban trabajando solas.
El 15,5% de las microempresas tenían tres o más trabajadores, incluyendo a los propietarios del negocio.
"La mayor concentración de microempresas unipersonales se presenta en los servicios con un 80,4%, mientras que los negocios integrados por dos o más personas en su mayoría son del sector agropecuario 63,9 %", apunta el comunicado.
Financiamiento y expectativas
En los últimos cinco años el 16,4% de este tipo de empresas solicitó créditos a entidades financieras para impulsar su actividad económica, de las cuales solo el 14,4% pudo obtener recursos.
El sector agropecuario es el que recurre con mayor frecuencia a la solicitud de créditos (27,4 %) y el sector industria el que menos pide financiamiento (12,1 %).
El Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) es bastante conocido entre los trabajadores independientes que tienen microempresas en sus casas.
El 50% de los microempresarios afirmaron conocer el SBD, de los cuales el 58,7% se enteró por medio de noticias, el 28,1% por publicidad y el 4,9% por familiares, amigos y vecinos.
En cuanto a sus expectativas para el futuro, el 94% de los empresarios pequeños esperan continuar con su actividad económica y solo el 6% no desea seguir con su negocio.
Luis Miguel Alfaro, coordinador de la encuesta del INEC, explicó que un 40% de las personas que se dedican a microempresas lo hace por necesidad, mientras que el 47% lo hace por oportunidad y el 12% por seguir una tradición.