El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Mauricio Claver-Carone, considera que Centroamérica tiene una oportunidad histórica y única de atraer empresas de Asia en ese momento, en una conversación con periodistas de Centroamérica y República Dominicana que realizó este 8 de marzo.
“Nearshoring… creo que es una oportunidad histórica. La reconfiguración de las cadenas globales de suministro ha creado esta oportunidad, única en la vida para los países de Centroamérica para que atraigan inversiones”, dijo Claver-Carone cuando comentó sobre las oportunidades que tiene esta región, Panamá y República Dominicana.
Claver-Carone explicó que con la covid-19 se cerraron las exportaciones de China, y se vio, por primera vez, en la economía de los Estados Unidos, la sobreinversión y la sobredependencia del mercado consumidor más grande del mundo hacia la manufactura de China. Se crearon presiones inflacionarias y atascos, de los cuales todavía, dos años después, los Estados Unidos, no se ha recuperado, expresó.
“Yo personalmente tuve la experiencia, en otra vida, de ver cómo los suplidores en otras partes del mundo, particularmente en la China y Asia, no fueron socios confiables durante este tiempo de crisis; sin embargo, durante la covid-19, ese mismo tiempo, las cadenas de abastecimiento suplidoras de Latinoamérica y el Caribe, México, Centroamérica, los países del Caribe, el sur, etc., siguieron funcionando”, comentó Claver-Carone.
El representante del BID añadió que en este escenario se pudo trabajar muy bien, lo que permitió que al final el shock en los Estados Unidos no fuera peor gracias a las cadenas existentes que todavía había con México, y en general, con Latinoamérica y el Caribe. “(...) fue una lección en la cual aquí (en Estados Unidos) se palpó entre los sectores y las empresas, entre los políticos, en todos los sectores”, concluyó el Presidente”.
“Latinoamérica y el Caribe tiene ahora la oportunidad porque, por primera vez, de la misma manera que todos esos empresarios pasaron los últimos 20, 30 años mirando los mercados de Asia a costas de Latinoamérica y el Caribe, ahora están viendo a Latinoamérica y el Caribe a costas de Asia”, señaló Claver-Carone.
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Explicó que el BID está financiando el nearshoring, que se refiere a la tendencia donde las compañías tratan de mantener sus procesos de negocio y de tecnología cerca de los contratantes y acercar a las cadenas de valor.
Comentó que en el 2021 financiaron $4.000 millones para el nearshoring, para que los países mejoren su logística y capacidad para recibir estas inversiones y otros $1.000 millones para las mudanzas de las empresas.
Explicó que hicieron un análisis sobre las ventajas comparativas de cada país en nearshoring, y en Costa Rica tienen ventajas en manufactura médica, electrónica, servicios de telecomunicaciones e investigación y desarrollo.
“Es una oportunidad enorme la que existe (…) el interés está ahí como no ha estado en los últimos 30 o 40 años cuando el mundo estaba girando hacia China, tenemos que aprovechar ese interés, esas oportunidades”, dijo Claver-Carone.
Agregó que un tercio de las empresas encuestadas en la China quieren trasladar parte o la totalidad de su producción fuera de ese país. Las naciones de Centroamérica pueden actuar rápidamente para aprovechar esta oportunidad.