La producción de hidrógeno verde sigue avanzando en Costa Rica. La empresa Ad Astra Rocket Company Costa Rica, con sede en Liberia, Guanacaste, prepara el arriendo de vehículos de transporte para uso privado a partir de 2025, de la mano con el aumento en la producción de este combustible.
Fundada por el astronauta costarricense Franklin Chang Díaz, la empresa celebró su décimo aniversario de operaciones en el país el pasado noviembre y el proyecto de producción y uso de hidrógeno en el transporte superó con buen suceso la etapa piloto. Ahora se orienta hacia la escala comercial con el objetivo de proporcionar un servicio de transporte cero emisiones de carbono.
La habilitación de la flota de autobuses, inicialmente estimada en cuatro unidades, resulta de una alianza con la firma administradora de fondos de inversión Mesoamérica y la empresa Cavendish, perteneciente al Grupo Purdy. Esta asociación se creó con el propósito de implementar ecosistemas de hidrógeno para el transporte en Liberia.
En una entrevista con La Nación, Chang Díaz mencionó que estos ecosistemas, que abarcan desde la producción de hidrógeno hasta la habilitación del transporte, podrían replicarse en otras regiones de Costa Rica, así como en el resto de Latinoamérica y el Caribe. Aseguró que el proyecto es financieramente autosostenible.
La inversión realizada en Costa Rica asciende a $7 millones. Más de la mitad aportada por Ad Astra Rocket y el resto por socios nacionales e internacionales. También se recibieron contribuciones de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), el Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Chang Díaz señaló que el servicio de transporte estará disponible para aquellos clientes que deseen mediante el servicio de arrendamiento, pagando un precio por kilómetro. La implementación total del proyecto tomará al menos año y medio, considerando los tiempos de entrega de los equipos, especialmente del electrolizador, que convierte el agua en hidrógeno y oxígeno mediante el suministro de energía eléctrica.
La empresa planea expandir la producción en la planta de 60 kilos diarios en la actualidad a 430 kilos diarios.
El proceso
La producción de hidrógeno se lleva a cabo mediante el proceso de electrólisis del agua, que separa los elementos a través de electricidad. Una vez almacenado en tanques de alta presión, el hidrógeno se utiliza como combustible, permitiendo el uso de energías renovables, como la solar y eólica, en la recarga eléctrica de los vehículos.
Durante la etapa piloto, el proyecto, en colaboración con empresas aliadas nacionales e internacionales, lanzó Nyuti, el primer autobús urbano eléctrico de pila de combustible, en noviembre de 2017. En diciembre de 2018, se incorporó una flota de cuatro sedanes eléctricos de pila de combustible, actualmente destinados a servicios turísticos.
Según los cálculos de la empresa, durante esta etapa se recorrieron más de 66.000 kilómetros de transporte sin emisiones, evitando la liberación de más de 14 toneladas de dióxido de carbono al medio ambiente.
Chang Díaz, de 73 años, destacó que la idea de producir hidrógeno verde surgió durante su tiempo como tripulante de transbordadores espaciales, donde la energía se garantizaba con celdas de hidrógeno, y el proceso de producción de electricidad generaba agua para el consumo en la misión. “Así me enamoré de este concepto”, aseguró.
En setiembre pasado, con el respaldo de la Fundación Kellogg de Estados Unidos y la Asociación Estrategia Siglo XXI, inició el proyecto Escuela del Hidrógeno para capacitar a jóvenes que serán futuros colaboradores en la industria del hidrógeno verde.
Chang Díaz mencionó que Ad Astra Rocket, con 10 colaboradores hasta ahora, es la única empresa que ha desarrollado la producción de este combustible en el país, pero tiene conocimiento de otras instancias privadas interesadas en impulsarlo.
La Nación solicitó información al Ministerio del Ambiente y Energía (Minae) sobre la situación actual de las iniciativas de producción de hidrógeno verde en el país, pero no se obtuvo respuesta.
Iniciativa busca activar la demanda
Esteban Echeverría, coordinador de la Alianza para el Hidrógeno de Costa Rica, indicó que actualmente se está desarrollando una iniciativa para activar la demanda de hidrógeno verde mediante la creación de un ecosistema en torno a este combustible. Esto se lograría a través de mecanismos de financiamiento para inversiones, especialmente en modelos de negocio de transporte de carga pesada.
Estos modelos incluirían la instalación de infraestructura de generación y venta de hidrógeno verde, así como la adquisición y operación de camiones propulsados por este tipo de combustible. En etapas posteriores, se contempla el uso del hidrógeno en otras aplicaciones industriales, como la producción de cemento, vidrio y fertilizantes.
Echeverría explicó que en diciembre de 2022 el proyecto ingresó a la fase de preparación detallada, que implica la formulación completa. En julio pasado se envió una propuesta completa que actualmente está en revisión por la entidad Mitigation Action Facility, un fondo internacional de donantes que trabaja en pro del cambio climático.
Dijo que se espera una respuesta a principios de 2024, y de ser aceptada, se obtendría una subvención de $27,6 millones para el desarrollo de todas las acciones necesarias para apoyar el despegue del hidrógeno verde en Costa Rica.
La Alianza por el Hidrógeno, establecida en 2019, tiene como objetivo convertirse en un mecanismo de coordinación del ecosistema y posicionarse como agente facilitador de la transición energética. También busca promover esquemas de apoyo al sector y fomentar la adopción de políticas públicas. Actualmente, está conformada por 35 entidades, entre empresas privadas y entidades públicas.