La reciente debacle de la plataforma de criptomonedas FTX, cuyo valor alcanzó los $32.000 millones a inicios del 2022, atizó en los últimos días el desplome del mercado de monedas digitales. Esto ocurre en un año caracterizado por las turbulencias en la industria. Aquí le explicamos los pormenores de la caída.
Esta compañía, fundada en el 2019 por Sam Bankman-Fried, uno de los gurús del mundo cripto, se posicionó como una de las firmas con mayor participación en el ecosistema de criptomonedas. Incluso, en el 2021 firmaron un patrocinio de $135 millones con el Miami Heat, de la NBA, para renombrar su estadio como FTX Arena.
LEA MÁS: Debacle de FTX es un nuevo revés para el mundo de las criptomonedas
Sin embargo, en cuestión una semana, el operador sufrió un duro revés por falta de liquidez. Esto obligó a su dueño a negociar una venta con la plataforma Binance, que finalmente no se concretó. También, alimentó la incertidumbre en el mercado de las criptomonedas, que alcanzaron sus niveles más bajos de los últimos años.
Finalmente, este viernes 11 de noviembre, FTX, anunció que se había acogido a la protección de la ley de quiebras en Estados Unidos e informó que su fundador, Sam Bankman-Fried, renunció al cargo de director ejecutivo. Él fue reemplazado por John J. Ray III.
“FTX Trading (...) y aproximadamente 130 compañías afiliadas al FTX Group iniciaron el procedimiento voluntario del ‘capítulo 11′ de la ley de quiebras en Estados Unidos, para evaluar sus activos”, anunció FTX en un comunicado publicado en Twitter.
LEA MÁS: FTX se declara en bancarrota y solicita protección en Estados Unidos
Pero, ¿qué fue lo que pasó? Un artículo de un sitio especializado sembró las dudas sobre las cuentas de la firma y los tuits del presidente de Binance, Changpeng Zhao, precipitaron retiros masivos de los usuarios de FTX durante el fin de semana, los cuales se estimaron en unos $6.000 millones.
Zhao, quien afirmó que FTX le pidió ayuda por una “importante crisis de liquidez”, firmó el martes una carta de intención para comprar la plataforma. Sin embargo, el miércoles 9 de noviembre anunció que finalmente renunciaba a la transacción, tras auditar las operaciones de la firma, alegando una mala gestión de fondos de clientes e investigaciones abiertas.
“Al comienzo, nuestra esperanza era poder ayudar a los clientes de FTX a ofrecer liquidez, pero los problemas escapan a nuestro control o superan nuestra capacidad de ayudar”, aseguró Binance, la mayor plataforma de divisas virtuales, en un comunicado.
Así, ante la negativa de compra de Binance, FTX cayó a su nivel más bajo en dos años y dejó en el limbo a sus clientes. Como consecuencia, los mercados de criptomonedas no tardaron en reaccionar hacia la baja y las principales monedas digitales alcanzaron valores que no se veían desde hace algunos años.
¿Cómo impactó esto al mercado cripto?
El mercado de las criptomonedas suele estar asociado a una volatilidad constante, pero este año ha estado marcado por un desplome en los precios. El valor de mercado de las criptomonedas subió hasta $3 billones en noviembre del año pasado, antes de caer a menos de $1 billón, en junio del 2022.
Las fuertes caídas en las principales criptomonedas, como el bitcóin y el ether, se acrecentaron en los últimos dos días, ante el pánico provocado por los problemas de liquidez de FTX. Estas monedas digitales tocaron mínimos y su valor ha caído durante todo el año.
El precio del bitcóin tocó un mínimo en dos años este jueves, aunque frenó la precipitada caída que sufrió en las últimas 24 horas, tras el anuncio de la retirada del acuerdo de compra de Binance para rescatar a su rival. La criptomoneda se situó en $17.000 y no registraba valores tan bajos desde noviembre del 2020.
Tome en cuenta que el bitcóin alcanzó un pico de $65.000 hace un año, en noviembre del 2021, y desde entonces inició una caída sostenida en su valor, que se agravó en los últimos meses. La criptomoneda arrancó el año en $46.000, pero ha perdido más del 60% de su precio en este 2022.
En tanto, el Ether, la segunda moneda digital en importancia, se recuperó levemente este jueves, posterior al anuncio de que la inflación anual en Estados Unidos bajó a 7,7 % en octubre pasado. La criptomoneda se situó en $1.270, aunque muy por debajo de los $3.700 en los que inició el año.
Por su parte, el FTT, un criptoactivo vinculado a FTX, se desplomó en 75% del lunes al martes, pues pasó de $22 a tan solo $5,5. La caída se agudizó para el miércoles, pero recuperó un poco de terreno en su último registro, donde se situó en $3,5, pero lejos de sus valores del fin de semana.
Sobre la caída de FTX, Moody’s Investor Service explicó que, si bien los riesgos generales de las criptofinanzas se acercan mucho a los de las instituciones financieras tradicionales, la opacidad del sector y las diferencias en los marcos legales y regulatorios con los que operan los hacen más difíciles de medir.
¿Qué pasará en Costa Rica?
Los problemas de FTX desencadenaron una crisis de confianza en las criptomonedas. El resultado es más que evidente con la caída en el valor de las principales monedas digitales del mundo, que ha tenido un año crítico, con un desplome en sus precios.
Según Otto Mora, miembro de AsoBlockchain Costa Rica, esa será una de las implicaciones en Costa Rica de la caída de FTX, pues considera que tomará tiempo recuperar la confianza del público que no se encuentra involucrado en el sector de monedas digitales.
Mora explicó que la mayoría del intercambio de criptomonedas en Costa Rica se hace persona a persona, es decir, sin una plataforma intermediaria de por medio, lo que en cierta medida mitiga el impacto local de la caída de compañías como FTX.
“Hasta tanto estas empresas como Binance, Coinbase o FTX no entren a la región formalmente, la afectación es poca, porque incluso la única manera de depositar en esas plataformas es mediante transferencia internacional o compra con tarjeta de crédito, y muchos de los bancos locales no lo permiten”, agregó Mora.
¿Qué sigue para FTX?
De momento, el futuro de FTX es incierto. La retirada de Binance del acuerdo de compra dejó en el limbo a la compañía y sus clientes. Sin embargo, agencias internacionales como Reuters informaron de que el dueño de la empresa intentará sacarla a flote.
Según Reuters, Sam Bankman-Fried está tratando de armar un paquete de rescate de hasta $9.400 millones entre fondos de inversión y otras plataformas de criptomonedas. No obstante, la agencia indicó que de momento han avanzado poco y que el fundador se resistió a declararse en quiebra y se negó a nombrar asesores para reestructurar la compañía.
La situación de FTX también despertó el interés del gobierno de Estados Unidos. Este jueves, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó que la administración de Biden está “al tanto” sobre lo sucedido con la compañía y continuará monitoreando su evolución.
El gobierno de Biden ha abogado por regular la industria. A principios de año, el presidente estadounidense firmó una orden ejecutiva que instaba a las agencias gubernamentales a trabajar en un enfoque integral para establecer controles sobre ese mercado.
“Esto es algo que claramente monitoreamos y que vemos como un tema importante. Las noticias más recientes subrayan aún más estas preocupaciones y resaltan por qué se necesita una regulación prudente de las criptomonedas”, agregó Jean-Pierre.