Los deportes electrónicos (eSports) están viviendo una acelerada transformación en el mundo.
La industria aumenta cada vez más sus ya masivas audiencias y está convirtiéndose en un negocio cada vez más lucrativo que produce miles de millones al año.
En Costa Rica, Saprissa e Infinity eSports van a la cabeza y dan los primeros pasos hacia la profesionalización de la disciplina.
Decenas de juegos que nacieron con el propósito de entretener tienen hoy sus propios torneos, reglas y equipos, con jugadores profesionales que reciben jugosos salarios. También llenan arenas de miles de personas dispuestas a ver las competencias, además de las que observan las partidas mediante streaming.
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Juegos como League of Legends (LoL), FIFA, Gran Turismo y muchos otros congregan a los fiebres de los videojuegos en una combinación de competencia y espectáculo. Solamente este año, los eSports generarán casi $1.380 millones en ingresos, según el Global eSports and Live Streaming Market Report, de la firma especializada Newzoo.
En Costa Rica, la industria no es nueva, ya que desde hace algunos años se organizan competencias, pero poco a poco se han dado los primeros pasos hacia la profesionalización en el país.
En el caso de Infinity, surgió en el 2009 como un grupo de amigos que se entretenían con videojuegos, y se convirtió en una empresa costarricense que formó el holding Infinity Gaming Media (IGM) junto a las firmas Ignite y Effects Films, que ahora apunta a posicionarse como el club más importante de Latinoamérica.
“En el 2017 entramos con una inversión y a partir de entonces empieza también toda una nueva etapa dentro de lo que, en su momento, era un equipo de LoL, para transformarse en un club multigaming que actualmente tiene 11 equipos en diferentes videojuegos”, explicó Nicolás Lescano, socio y gerente de mercadeo de Infinity eSports.
El equipo dio el salto competitivo en los años posteriores y hoy tiene presencia en prácticamente toda Latinoamérica, con equipos de trabajo en países como Perú, México y Colombia. Incluso, el año pasado fue bicampeón latinoamericano de LoL, uno de los juegos más populares del mundo, el cual reúne a millones de personas en sus competencias.
Si bien el gaming viene creciendo desde hace algún tiempo, se potenció en los últimos años, lo que obligó a los socios de Infinity a darle un giro al negocio, que sigue siendo un club, pero también tiene otras líneas de ingresos además de la deportiva, como la creación de contenido y un modelo de retail llamado Infinity Gaming Center, en el mall Oxígeno, en Heredia.
En tanto, Saprissa eSports es un proyecto mucho más nuevo. Nació en el año 2021 con la intención del club de acercarse a nuevas audiencias, pero con el compromiso de ser competitivos. En su corta trayectoria, han conseguido el bicampeonato de la liga de LoL en Centroamérica y el Caribe y han quedado a las puertas de disputar el torneo de Latinoamérica.
Gustavo Chinchilla, gerente general de Saprissa, resaltó que ingresaron al mundo de los deportes electrónicos al notar un crecimiento en la industria, por lo que vieron una oportunidad para posicionar la marca en audiencias que tuvieran nuevos intereses y que, si bien siguen el fútbol, también son un segmento que está mucho más familiarizado y enfocado en nuevas tecnologías y entretenimiento.
Triunfos deportivos
Son muchos los factores que pueden incidir para que un club de eSports se abra camino dentro de una industria que es altamente competitiva y que no solo requiere de buenos jugadores, sino también de una estructura empresarial sólida que respalde el proyecto.
Las empresas y organizaciones dependen principalmente del patrocinio como la principal fuente de ingresos. En el caso de Infinity, una de sus claves para atraer grandes marcas ha sido el éxito deportivo, ya que es muy difícil lograr un portafolio de firmas en un club que no destaque en las competencias.
Ellos son el único equipo de eSports en firmar una alianza de patrocinio con TikTok en América Latina, y en su portafolio cuenta con el auspicio de marcas de diferentes industrias, como Office Depot, Subway, Kappa, BMW y Tigo, solo por citar algunas.
“Se puede decir que Infinity ha sido un precursor, en ese sentido, de los patrocinadores en Latinoamérica, con marcas reconocidas a nivel mundial-, es decir, no endémicas, que no venían con la historia de los videojuegos, como lo puede ser una de software o de headtset”, afirmó Lescano.
Por su parte, Chinchilla aseguró que, pese a que el proyecto es reciente, el equipo ha tenido un crecimiento acelerado en la región, gracias al éxito en las competiciones que han disputado hasta el momento y que desean seguir consolidando para acercar a nuevos seguidores y marcas.
“La institución logró una importante alianza con un socio especializado en los eSports, con el objetivo de entrar a la industria por el camino correcto. Buscamos consolidar la gestión deportiva, pero también hemos logrado atraer a nuevos patrocinadores que nos están ayudando a consolidar la estructura del equipo en toda la parte comercial”, mencionó Chinchilla.
En su portafolio cuentan con el patrocinio de marcas como Claro e Infinity Gaming Center.
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Actualmente, Infinity eSports tiene más de 85 empleados, la mayoría de Costa Rica, aunque cuentan con jugadores de diferentes nacionalidades, creadores de contenido en Argentina, Ecuador y Chile, así como en otros países de Latinoamérica.
“En esta industria es muy difícil tener fronteras. Si hay algo que los deportes electrónicos no tienen es eso, y lo pensamos así: necesitábamos expandirnos y cruzar las fronteras de nuestro país”, resaltó Lescano.
Saprissa tiene una estructura más pequeña, ya que solamente compite en LoL. El equipo se compone de cinco jugadores titulares, más uno suplente. Además, tienen un staff técnico conformado por un jefe de proyecto, entrenador, asistente técnico, técnico de estrategia y analista de datos.
Seguir creciendo
Al igual que los videojuegos, la industria de los deportes electrónicos en Latinoamérica se transforma de forma acelerada.
Martín Blanquier, gerente para Latinoamérica de Riot Games, aseguró a Forbes que la pandemia acercó a nuevas audiencias y prevé que el crecimiento de la industria sea exponencial en los próximos años.
Infinity tiene la consigna de seguir creciendo para posicionarse como uno de los clubes más grandes de la región. Para eso tienen entre sus planes cotizar sus acciones en la bolsa de valores; en su caso, la de Toronto, Canadá, tras una primera rueda de inversión realizada en el 2021.
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“Los planes son bastante desafiantes porque la industria en sí te desafía todo el tiempo. Estamos buscando inversión para seguir creciendo, para desembarcar en Brasil, para irnos a Estados Unidos o competir en algún momento en Europa, que ya hemos tenido ofertas”, explicó Lescano.
Por su parte, Saprissa planea mantenerse en LoL, aunque en un futuro cercano espera dar un siguiente paso con un equipo que alcance la escena competitiva del videojuego en su versión mobile (celulares), pues actualmente juegan en la modalidad de computadora de escritorio.
Además, seguirán trabajando por ampliar la base de saprissistas en los segmentos más jóvenes, con la visión clara de que, para lograrlo, es trascendental obtener buenos resultados deportivos en la escena, los cuales serán claves para el desarrollo y el crecimiento del proyecto.