Las exenciones y reducciones de impuestos se mantienen como un incentivo central en la atracción de compañías a las zonas francas, pese a la aparición de otros beneficios, advirtieron representantes de ese sector.
En eso coincidieron el presidente de la Asociación de Zonas Francas de las Américas (AZFA), Juan Pablo Rivera, el director de Mercadeo del Grupo Zeta, Édgar González, y Yazmín Alvarado, directora del Centro de Servicios Globales del Grupo Bimbo en Costa Rica.
En tanto, Jorge Brenes y Álvaro Valverde, presidente y director ejecutivo, respectivamente, de la Asociación de Empresas de Zonas Francas (Azofras), señalaron la creciente importancia de los incentivos entregados por la capacitación de personal, la protección ambiental y la ayuda a las comunidades.
En Costa Rica, las empresas en general reciben exoneraciones, en particular del impuesto sobre la renta, durante un periodo inicial de ocho años. Para las que se instalen en zonas de menos desarrollo relativo, se dan beneficios adicionales a los fiscales.
AZFA estima que esos nuevos incentivos, denominados de tercera generación, son relevantes, pero como un complemento a los beneficios fiscales.
Según Rivera, la aparición de esa tercera generación de estímulos va paralela a la decisión adoptada en la Organización Mundial del Comercio (OMC) de no permitir ayudas directas, como bonos por volumen de exportaciones y otras modalidades.
Encuentro. Las opiniones se obtuvieron al inaugurarse ayer, en el hotel Real Intercontinental, en Escazú, la XX Conferencia de Zonas Francas de las Américas y el III Congreso Nacional de Zonas Francas de Costa Rica.
El evento reúne en Costa Rica, hasta hoy, a cerca de 300 representantes de firmas y de organismos privados y estatales relacionados con este sector.
Al destacar la relevancia de ese régimen, Brenes recordó que las empresas de ese tipo exportaron en Costa Rica $3.179 millones en el 2015, lo cual corresponde a un 47% del valor de las ventas totales del país.
Costa Rica tiene actualmente 313 compañías en ese sistema, lo que lo coloca en el quinto lugar en América Latina, solo detrás de Uruguay, Colombia, Puerto Rico y República Dominicana.
Esas firmas generan 77.944 empleos directos, lo cual coloca al país en el sexto lugar en este campo en Latinoamérica. República Dominicana es donde dan más empleo, con 160.000 puestos.
Rivera dijo que en Latinoamérica hay 10.800 firmas y 1,7 millones de empleos en el régimen.