La medida de los tres países es relevante porque las reformas, aprobadas ayer por una mayoría del 85% de los 24 miembros del directorio del Fondo Monetario Internacional, tienen como objetivo reflejar la importancia de los mercados emergentes en la economía global.
Para que las reformas se hagan efectivas deben ser ratificadas por la junta de gobernadores del FMI durante un encuentro en Singapur este mes.
La posición tomada por Brasil, Argentina e India “significa un fuerte rechazo por parte de los principales mercados emergentes”, dijo una fuente ayer a Reuters."Juntos, tienen una voz importante", agregó.
Si el paquete de reformas es ratificado en Singapur, el poder de voto, o las cuotas, de las economías emergentes con menor poder de representación -China, Corea del Sur, México y Turquía- inmediatamente será incrementado.
Una segunda ronda de ajustes de cuotas vendrá una vez que se decida la fórmula para calcularlas.
Asimismo, hubo un acuerdo para incrementar los denominados votos básicos, lo que ayudaría a proteger el peso de los países con bajos ingresos, mayormente de Africa, en el sistema.
La segunda ronda de ajustes en las cuotas, sin embargo, tendrá que esperar hasta que los parlamentos en los países miembros aprueben el incremento en los votos básicos.
Tim Adams, el subsecretario del Tesoro de Estados Unidos para asuntos internacionales, dijo que era importante que los miembros del fondo aborden las reformas “con el espíritu de transformar el fondo para que luzca el rostro de la economía global actual”.