Álvaro Ramos, actual jerarca de la Superintendencia de Pensiones (Supén), presentó su renuncia al cargo, de forma verbal, ante el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif).
Durante la sesión del Consejo, de este lunes 2 de marzo, Ramos informó de que, en los próximos días, presentará su dimisión formal por escrito, confirmó Alberto Dent, presidente del Conassif.
“Entiendo que tiene una oferta laboral que ha aceptado y que estaría presentando su renuncia en los próximos días, lo hizo (la dimisión) verbal, en la sesión de ayer (lunes) y en el Consejo esperamos que lo haga de forma oficial, por escrito”, confirmó Dent.
Ramos luego indicó a La Nación que después Semana Santa ya no estará en la Superintendencia.
“Regresaré a las labores académicas a tiempo completo. Tengo una oportunidad laboral académica en una universidad privada”, contó el funcionario.
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Actualmente, el funcionario también imparte lecciones en la Universidad de Costa Rica (UCR), donde se mantendrá como docente, según explicó.
El Superintendente fue nombrado en el cargo por un periodo de cinco años, en junio del 2015. Su periodo en el puesto vencía el próximo 19 de junio.
Proceso de relevo
El Presidente del Conassif detalló que, una vez recibida la dimisión formal, comenzarán el proceso de designación de la nueva persona que dirijirá la Supén.
“En los próximos 15 o 22 días tenemos que entrarle al tema (...); el Consejo debe tomar la decisión de cuál es la ruta que quiere seguir”, destacó Dent.
En diciembre pasado, la autoridad del Consejo reconoció que están en un proceso de análisis de uns posible fusión de superintendencias, para reducir costos.
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Actualmente, hay cuatro instituciones supervisoras en el país. Estas son del sector financiero, pensiones, seguros y mercado de valores.
El próximo jerarca que se nombre en Supén asumirá el cargo con un tope salarial de ¢5,4 millones impuesto por la reforma fiscal, aprobada en diciembre del 2018.
Las personas designadas como superintendentes, previo a la promulgación de la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, reciben un sueldo promedio mensual de ¢9,5 millones.