El Banco Central de Costa Rica (BCCR) revisó el crecimiento de la producción al alza y ahora espera que aumente 3,9%, en el 2021, lo cual es un punto porcentual más respecto a su previsión de abril pasado (2,9%).
Así lo informó Rodrigo Cubero, presidente de la autoridad monetaria, durante la presentación de la revisión del Programa Macroeconómico 2021-2022, efectuada este viernes 30 de julio.
Para el próximo año, el ente emisor estima que la producción costarricense crezca 3,7%, levemente por encima del 3,6% presentado en la revisión anterior.
En enero pasado, durante la presentación del Programa Macroeconómico 2021-2022, el BCCR estimó un crecimiento de la economía del país de 2,6%, para este año respecto al 2020, después de una contracción del 4,5% en el producto interno bruto (PIB), el año pasado.
Sin embargo, el 30 de abril anterior, modificó la proyección de incremento económico al 2,9% para 2021; y lo volvió a hacer en esta revisión de medio año.
La economía costarricense sigue en recuperación; de hecho, el resultado es mejor al previsto, a raíz de la situación externa. Pero también influye la situación de búsqueda de la sostenibilidad fiscal que mejora la confianza de los agentes económicos”
— Rodrigo Cubero, presidente del BCCR.
Cubero afirmó que los principales riesgos para estas proyecciones son el atraso en la aprobación de las leyes relacionadas con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), así como el incremento de los contagios del nuevo coronavirus.
“La economía costarricense sigue en recuperación; de hecho, el resultado es mejor al previsto, a raíz de la situación externa. Pero también influye la situación de búsqueda de la sostenibilidad fiscal que mejora la confianza de los agentes económicos”, subrayó el presidente del emisor.
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El jerarca destacó el esfuerzo del Gobierno para mejorar la situación de sus finanzas.
La previsión del déficit fiscal, dada este 30 de julio, es que sea del 6,2% del producto interno bruto (PIB). Pero en enero anterior, se informó que sería equivalente al 7% del PIB.
Efecto externo
El mejor crecimiento esperado se explica por una mayor demanda externa a raíz del dinamismo más acentuado de los socios comerciales de Costa Rica, en especial, en Estados Unidos.
Cubero explicó que el repunte en la actividad económica del país se inició, primero, por el régimen especial de zona franca, dada la mayor demanda externa. Pero el régimen definitivo también comenzó a tener mayor dinamismo en ventas al extranjero e internas.
Los datos del BCCR muestran que, a junio anterior, las ventas de bienes al extranjero desde zona franca tuvieron un incremento de 53,7%, respecto al mismo periodo del año pasado.
En el caso de las compañías del régimen definitivo, el aumento interanual fue del 13%, en el primer semestre de este año.
“El cambio en las proyecciones es fundamental por el peso de la demanda externa y es lo que explica, principalmente, la mejora en el crecimiento al 3,9%. Eso no quiere decir que no haya una recuperación del consumo. En el 2020 hubo una caída del consumo de los hogares pero, en el 2021, hay un repunte importante”, explicó el jerarca del Central.
Para este año, el BCCR proyecta una tasa de variación del 1,6% en el consumo de los hogares, desde la contracción del 3,1%, durante el año pasado.
Cubero añadió que, del lado de la importación, los bienes de consumo intermedio y consumo final muestran una mayor actividad.
“Esto significa que la recuperación viene debido a la demanda de los hogares, lo cual es significativo”, explicó en funcionario.
Sin embargo, aceptó que la lenta reducción del desempleo limita que el consumo de las familias sea mayor.
La tasa de desocupación fue del 17,7% en el trimestre móvil comprendido entre abril y mayo anterior, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
El economista José Luis Arce consideró las previsiones del Banco Central como optimistas, máximo porque aún se mantienen restricciones sanitarias que afectan la economía.
“El crecimiento más alto está relacionado con turismo y zonas francas, si es zonas francas el efecto arrastre del resto de la economía es menos intenso. La recuperación del gasto interno dependerá de la recuperación del mercado de trabajo y de la reapertura”, afirmó Arce.
La mejora en las previsiones del BCCR ocurre en un contexto de baja inflación, pues en junio pasado fue de 1,9%.
Cubero reconoció que hay presiones al alza sobre este indicador, como el aumento internacional de las materias primas, en especial, los combustibles.
Sin embargo, se prevé que sean factores transitorios, debido a la mayor demanda de dichos bienes por el efecto de la recuperación de las economías desarrolladas.
Por esa razón, el Banco Central mantuvo su meta de inflación en el 3%, para este año y el próximo, con un rango de tolerancia de desviación de una punto porcentual.
Evolución por actividad
El Presidente del BCCR explicó que las actividades económicas que mostraron un mejor resultado son la manufactura, la inmobiliaria, y la información y comunicación, las cuales lograron superar los niveles previos a la pandemia.
Para la industria manufacturera se estima una variación porcentual del 10,5%, durante este año.
En el caso del comercio, el BCCR proyecta un crecimiento de 5,8% durante el 2021, respecto a la contracción del 9,7%, el año pasado.
Para los hoteles y restaurantes, vinculados de manera relevante al turismo, se prevé un crecimiento del 6,7% durante este año. Sin embargo, dicha actividad cayó un 44,9%, en el 2020.
Una situación similar ocurre con el comercio. El BCCR estima que crezca 5,8%, durante el 2021, desde la contracción del 9,7% registrada el año anterior.
“En la primera parte de este año teníamos una previsión del turismo que no se cumplió y nos llevó a ser un tanto pesimistas. Pero ahora observamos una recuperación que la incorporamos en la nueva proyección para el 2021 y 2022”, afirmó Róger Madrigal, director de la División Económica del Banco Central.
Para Alonso Elizondo, director ejecutivo de la Cámara de Comercio, durante este año ocurre un efecto rebote en el sector, pues el año pasado hubo una caída muy fuerte.
“Los números de crecimiento aún no nos ponen al nivel del 2019, en valores absolutos. El problema es que aún se mantienen muchas restricción en aforo, horario y vehicular, lo cual afecta la actividad”, destacó Alonso.
Álvaro Jenkins, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep), consideró que el país requiere de medidas sanitarias contra la covid-19 que mejoren la actividad económica.
Mencionó, por ejemplo, que eliminar la restricción vehicular entre semana y ampliarla a las 11 p.m., durante los fines de semana, ayudaría a las empresas a incrementar su actividad y contratar nuevo personal.