Tasa de interés del BCCR sube a 4% en un intento por frenar la alta inflación

De esta forma, la tasa pasó de 2,50% a 4%, según la información sobre el indicador que publicó el Banco Central en su página web. La decisión es una medida para luchar contra la alta inflación que afronta el país.

El 15 de diciembre del 2021, el Banco había acordado un incremento de 0,5 puntos porcentuales, el 26 de enero otro aumento igual, y luego, el 14 de marzo del 2022, realizó otro ajuste, pero más alto, de 0,75 puntos porcentuales.

La inflación ha tenido un fuerte repunte este año. En marzo pasado, la variación interanual (de cada mes respecto al mismo mes del año anterior) del índice de precios al consumidor (IPC) fue de 5,79%, el mayor incremento desde noviembre del 2014.

Con el incremento en la tasa de política monetaria el Banco Central procura influir en el resto de tasas de interés del mercado financiero y frenar así el consumo, para evitar mayores presiones internas sobre los precios de los bienes y servicios, los cuales ya tienen fuertes presiones externas.

Inflación mundial afecta la local

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En un comunicado publicado en su página web, el Banco Central explicó que la inflación mundial ha venido en aumento desde la segunda mitad del 2021, debido tanto a factores de oferta como de demanda.

Algunos de esos factores son: la recuperación de la actividad económica tras la pandemia, que provocó un desplazamiento del consumo desde servicios hacia bienes; los choques de oferta por razones geopolíticas (que afectaron a los mercados de hidrocarburos) y climáticas (que afectaron la producción agrícola), y a cuellos de botella en las cadenas globales de suministro, como consecuencia de las medidas de contención sanitaria, todo lo que llevó a un aumento en los precios de las materias primas y en los costos del transporte marítimo.

Luego, a partir de febrero del 2022, con la invasión de Rusia a Ucrania se exacerbaron las presiones al alza en los precios internacionales de las materias primas, pues ambos países son exportadores importantes de combustibles, granos básicos y metales.

“En este contexto, los organismos internacionales y los mercados financieros prevén un endurecimiento de la política monetaria, a una mayor velocidad de lo previsto a inicios del 2022, tanto en economías avanzadas como emergentes, y una desaceleración en el ritmo de crecimiento económico mundial”, indicó el Banco.

Todo esto ha impactado la inflación en Costa Rica. En el comunicado, el Banco Central explica que sus modelos de pronóstico proyectan que la inflación general en nuestro país se mantendría alta en los próximos meses y, a partir del segundo semestre de este año, iniciaría un proceso gradual de moderación.

Añadió que existe el riesgo de que el comportamiento alcista de la inflación afecte en forma persistente las expectativas, y genere así los llamados efectos de segunda ronda, que tornarían más duradero el aumento en la inflación.

También, hay otros factores que añaden a los riesgos al alza sobre la trayectoria proyectada de la inflación, uno de ellos que el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania se prolongue y el otro que los precios al productor muestran tasas de variación altas (15,0% en marzo pasado) y esto se puede traspasar a los precios al consumidor.

“Para señalizar el compromiso firme del Banco Central con una inflación baja y estable en el mediano plazo, contener las expectativas inflacionarias, acercar más rápidamente la TPM (tasa de política monetaria) hacia una posición neutral y contribuir a una más rápida convergencia de la inflación hacia el rango de tolerancia alrededor de la meta del Banco Central, la Junta Directiva determinó que en esta oportunidad era necesario hacer un ajuste más fuerte al alza, de 150 puntos base, en la TPM”, explicó la autoridad monetaria.

Además de mover la TPM, la Junta Directiva acordó fijar la tasa de interés bruta de los depósitos electrónicos a un día plazo (DON) en 2,68% anual.