Londres. AP La economía británica se está contrayendo al paso más acelerado registrado desde la crisis financiera mundial del 2009, debido al referendo en el que Reino Unido decidió abandonar la Unión Europea (UE).
El índice de gerentes de compras, una medida de actividad económica atentamente observada por analistas, bajó a 47,7 puntos en julio comparado con 52,4 en junio. Las cifras van en una escala de 100 puntos y 50 marca la diferencia entre crecimiento y contracción.
El sondeo, realizado por IHS Markit, es una de los primeros cotejos de las repercusiones económicas del brexit .
Si el Reino Unido abandona la Unión Europea, implicaría que las empresas basadas en Gran Bretaña quedarían divorciadas del mercado común europeo, donde no hay aranceles al comercio e impera el libre movimiento de bienes y personas.
La incertidumbre sobre las relaciones comerciales de Gran Bretaña, que tomarán años en negociar, está llevando a muchas compañías a inhibirse de invertir, o incluso a efectuar recortes.
“En julio hubo un deterioro drástico de la economía y la actividad empresarial se redujo a su paso más acelerado desde la crisis financiera global de comienzos de 2009”, dijo Chris Williamson, economista de Markit.
“La contracción, que se ha expresado en cancelaciones de pedidos, ausencia de pedidos nuevos o en la postergación o cancelación de proyectos, fue atribuida de una manera u otra al brexit” , dijo.
También tuvo repercusión la gran incertidumbre política que reinó inmediatamente después de la votación, cuando renunció el primer ministro y los principales partidos se vieron sumidos en el caos.
Según el sondeo Markit, tanto la producción empresarial como los pedidos de productos disminuyeron en julio por primera vez desde fines de 2012. La disminución de mes a mes fue la más pronunciada en la historia del sondeo.