EscucharUn equipo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y las autoridades de Costa Rica llegaron a un acuerdo a nivel del personal técnico, para que el país acceda al recién creado Fondo Fiduciario para la Resiliencia y la Sostenibilidad, que significaría un desembolso aproximado de $710 millones; además de acordar las políticas necesarias para completar la tercera revisión del actual programa de desembolsos en el marco del Servicio Ampliado.
“El equipo del FMI y las autoridades de Costa Rica llegaron a un acuerdo a nivel del personal técnico sobre las políticas necesarias para completar la tercera revisión del programa de reformas económicas respaldado por el SAF, y sobre la solicitud para acceder a recursos financieros del SRS, esta última sujeta a la plena operacionalización del Fondo Fiduciario para la Resiliencia y la Sostenibilidad. El Directorio Ejecutivo del FMI analizará estas solicitudes en las próximas semanas”, se informó por medio de un comunicado de prensa publicado este martes 4 de octubre.
El FMI efectuó, entre el 20 de setiembre y este martes 4 de octubre, la tercera revisión del programa de reformas económicas de Costa Rica vinculadas al acuerdo del Servicio Ampliado del FMI (SAF), que brindó acceso a $1.778 millones por un plazo de tres años.
El equipo técnico del FMI, dirigido por Manuela Goretti, realizó reuniones de trabajo con los funcionarios del Gobierno y del Banco Central. Además, sostuvieron una cita con un grupo de diputados este lunes.
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En el comunicado del FMI, se destaca que la conclusión de la tercera revisión del órgano brinda a Costa Rica acceso a un nuevo desembolso de la operación crediticia por $264 millones, pero este debe aprobarlo el directorio del Fondo para girarse. Igual debe ocurrir con la nueva operación de $710 millones.
“El nuevo servicio (de Resiliencia y la Sostenibilidad) respaldaría los esfuerzos pioneros de Costa Rica para evaluar los riesgos climáticos, descarbonizar su economía, fortalecer la resiliencia de su infraestructura, así como enverdecer las reservas del Banco Central y el sector financiero”, recalcó la vocera del Fondo.
Goretti explicó que el nuevo financiamiento brinda recursos con vencimiento a más largo plazo y en condiciones más accesibles. También ayudará al país a acceder a recursos de otros organismos multilaterales oficiales y fondos privados para hacer frente al cambio climático.
En junio pasado, el Poder Ejecutivo confirmó su intención de acceder a nuevos recursos financieros en el marco de la nueva línea de crédito de Resiliencia y Sostenibilidad.
Metas superadas
Goretti afirmó que el país cumplió holgadamente con las metas fiscales del acuerdo, a pesar de sufrir las perturbaciones provocadas por los ciberataques, ocurridos en abril pasado, así como el ascenso en el precio de las materias primas.
“Las autoridades están bien encaminadas para superar el objetivo del balance primario que se había fijado para finales de 2022, aun cuando brindan un mayor apoyo a la población más vulnerable para hacer frente al impacto de las crecientes presiones inflacionarias”, indicó la vocera del órgano.
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Para el próximo año, el objetivo del pacto será que el Gobierno Central logre un superávit primario equivalente al 1,3% del producto interno bruto (PIB). El balance primario se genera cuando los ingresos, provenientes principalmente de la recaudación de impuestos, superan a los gastos, pero sin incluir los intereses.
“Las autoridades deben avanzar con sus ambiciosos planes de aumentar la equidad y la progresividad de los impuestos sobre la renta personal, mejorar la equidad y la eficiencia del gasto público, así como fortalecer la gestión de la deuda”, sostuvo Goretti.
Durante su exposición en la conferencia de prensa, la funcionaria del Fondo dijo que el país enfrenta choques económicos externos que aumentaron la inflación del país. En agosto anterior, este indicador fue de 12,13% en su variación interanual, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
La previsión del Banco Central de Costa Rica (BCCR) es que la inflación llegue a su máximo, durante el tercer trimestre del 2022, y vuelva paulatinamente a la meta del 3% a finales del 2024.
“Los choques externos y la salida de capital de los fondos de pensiones también ejercieron presiones en el tipo de cambio y las reservas (del Banco Central) en la primera mitad de este año. En este contexto, se proyecta una desaceleración real del PIB hasta el 4,4% en 2022″, aseguró Goretti.
Además, elogió la decisión del BCCR de restringir la postura de la política monetaria y su disposición a continuar ajustándola.
La Junta Directiva del ente emisor inició un proceso acelerado de ascenso en su tasa de política monetaria (TPM) para llevarla de un 0,75%, en diciembre del 2021, hasta el 8,50% en la que permanece desde el pasado 15 de setiembre. Los ajustes se acordaron como medida para frenar las presiones inflacionarias.
Por otra parte, la jefa de la misión del FMI instó a las autoridades supervisoras del sistema financiero a mantener un monitoreo para anticipar fuentes de estrés derivadas de la desaceleración económica y el endurecimiento de las condiciones financieras.
“Son fundamentales las medidas en curso para reforzar las herramientas de supervisión, que incluyen las enmiendas jurídicas para fortalecer la resolución de bancos y el seguro de depósito”, sostuvo.
