La moneda conmemorativa del Bicentenario de la Independencia de Costa Rica comenzará a circular a partir de noviembre próximo. Se trata de una emisión especial de ¢500 que será de uso regular.
Se trata de una moneda bimetálica para lo cual el Banco Central de Costa Rica (BCCR) mandó a confeccionar un total de cinco millones de unidades con el objetivo de que “cada costarricense” tenga una en su poder.
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Rodrigo Cubero, presidente del BCCR, destacó que la moneda presenta una Costa Rica abierta y global, consciente de sus valores, de sus conquistas institucionales y de su rica herencia natural.
En la presentación de la moneda, este martes 28 de setiembre, Cubero destacó que el diseño fue realizado por José María Castro Madriz, docente en la Universidad de Costa Rica. Él es descendiente de cuarta generación, por padre y madre, del primer presidente del país y fundador de la República del mismo nombre. El profesor universitario donó los derechos sobre el diseño al Banco Central.
“Esta moneda conmemorativa nos presenta a una Costa Rica abierta y global, que asume su lugar en el mundo, representado por el globo terráqueo. Una Costa Rica consciente de sus valores, de sus conquistas institucionales y de su rica herencia natural”, destacó el jerarca
El jerarca mencionó que esta no será la única moneda conmemorativa, pues prevén futuras emisiones de las otras denominaciones, que mostrarán diferentes motivos o conmemoraciones.
Castro Madriz comentó que la moneda tiene una antorcha que simboliza la libertad, principio fundamental del país, sin el cual no existiría la democracia y la justicia social.
“Aparece un mapa en el cual se simboliza que todas las personas, ya sea por nacimiento o porque abrazaron esta patria como suya, son parte de esta celebración. Esta pieza de numismática es la primera en la historia costarricense que presenta el territorio de la isla del Coco”, dijo el académico.
En la presentación de la moneda conmemorativa participó el presidente de la República Carlos Alvarado, quien previó que la emisión será coleccionada por muchos costarricenses.
“Esta moneda cumple con un sueño que nos planteamos desde el 2019 al pensar en la conmemoración de los 200 años de Independencia de Costa Rica: que los costarricenses pudieran tener en sus manos un pedazo de esta historia que estamos construyendo juntos”, dijo el Mandatario.
Diseño y seguridad
La moneda conmemorativa tiene un diámetro de 28 milímetros, por lo que es más pequeña que la actual. Tiene un espesor de 2,25 milímetros y pesa 10,5 gramos. Está compuesta de un núcleo plateado de cobre y níquel, y un anillo externo dorado de cobre, zinc y níquel, que componen una sola pieza.
Es fabricada con una aleación reciclable, y es fácilmente distinguible de las monedas actualmente en circulación, explicó Cubero.
En el anverso se destaca la función como medio de pago y presenta elementos como una imagen latente de alta seguridad que al girar la moneda hacia los lados se observa cómo cambia el valor 500 por las siglas BCCR.
Además, en la parte inferior presenta cinco barras en alto relieve para facilitar el reconocimiento de la moneda a las personas con discapacidad visual.
En su reverso incorpora motivos alusivos al Bicentenario como el texto “200 años de Independencia”; y los años de la conmemoración 1821-2021.
También contiene las palabras “Libertad”, “Paz” y “Democracia”. En el centro una antorcha como motivo alegórico de la Independencia. Así como un globo terráqueo en cuya parte central se encuentra, en bajo relieve, un mapa de Costa Rica y sus cordilleras.
El BCCR informó de que para el público numismático se emitirá una cantidad limitada de piezas conmemorativas idénticas a las de circulación, con acabado pulido, brillante y con aplicación de color en el diseño del reverso, insertas en cápsulas transparentes y en estuche. Estarán disponibles en la tienda de Museos del BCCR, en las próximas semanas.
Al igual que cuando se emite un nuevo billete, la nueva moneda de ¢500 convivirá durante cierto periodo con la actual; es decir, la actual moneda mantendrá su valor como medio de pago en la economía nacional hasta la fecha que oportunamente será comunicada.