“Debido a las necesidades de financiamiento público del 15,7% del PIB en 2021 y a la gran incertidumbre sobre la estrategia fiscal, han aumentado los riesgos de incurrir en dificultades de financiamiento a corto plazo”, advirtió la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en el informe sobre perspectivas económicas publicado este 1.° de diciembre.
En el documento, la Organización hizo una revisión de las perspectivas para el próximo año. Para el mundo, redujo su estimación de crecimiento a 4,2% frente al 5% calculado anteriormente, pues si bien prevé que una salida a la crisis se acerca gracias a la futura vacuna contra el coronavirus, también considera que a corto plazo el panorama aún es incierto.
Para nuestro país, prevé que este año la producción caerá 5,6%, mayor al cálculo del Banco Central de Costa Rica (BCCR) de una baja de 4,5% y pronostica un crecimiento para el 2021 de 2%, por debajo de la estimación del ente emisor de 2,6%.
Según la OCDE, cuando la recuperación esté encarrilada, es fundamental para la estabilidad macroeconómica que la deuda pública retome la tendencia descendiente y sostenible, por lo que en ese momento debería restaurarse la prudencia y la regla fiscal.
Financiamiento 2021
La Organización muestra su preocupación por la alta cantidad de recursos que requerirá el país en el 2020 para poder financiar el déficit fiscal previsto para el próximo año (exceso de gastos totales sobre ingresos totales) y pagar las deudas de años anteriores que vencerán en el 2021 (la amortización).
La estimación oficial es que se requerirán ¢5,6 millones de millones (un monto equivalente al 15,7% de la producción estimada para el 2021) para cubrir el déficit fiscal (estimado en 8,8% de la producción) y amortizar la deuda (6,9% de la producción). En los últimos 11 años (del 2009 al 2019) las necesidades de financiamiento fueron equivalentes, en promedio, a 10,6% de la producción.
La entidad, a la cual Costa Rica fue invitada a ser el miembro 38, considera que este 2020 el déficit fiscal se ampliará a cerca del 9,5% del PIB (producto interno bruto) y la razón de deuda del gobierno central respecto al PIB estaría en torno al 80% los próximos años.
La previsión oficial en nuestro país es un déficit financiero del Gobierno Central de 9,2% del PIB para el 2020.
El saldo de la deuda gubernamental alcanzó en setiembre un 67,3% del PIB.
Édgar Robles, director del Posgrado en Economía de la Universidad de Costa Rica, explicó las consecuencias que podría experimentar el país si afronta dificultades de financiamiento.
“Las dificultades de financiamiento implican un aumento en el costo de la deuda, o sea, un alza en las tasas de interés que el Gobierno debe pagar para hacer sus bonos atractivos para los inversionistas, dados los elevados niveles de riesgo que se asume al invertir en títulos soberanos de Costa Rica”, detalló el economista.
“El aumento en tasas, a su vez, produce un encarecimiento del crédito para el sector privado, lo cual se traduce en menos inversión y un menor crecimiento económico. Por lo tanto, cualquier recuperación económica va a ser más lenta, con el consecuente desmejoramiento de indicadores sociales como el desempleo, la pobreza y la distribución de la renta”, añadió Robles.
El ministro de Hacienda, Elian Villegas, reiteró que la estimación del Gobierno es de un déficit de 9,2% del PIB y aseveró que se están haciendo los esfuerzos necesarios para que termine por debajo de esa proyección a partir de una contención muy fuerte del gasto.
“Este esfuerzo de contención del gasto se verá reflejado no solo en lo que es propiamente el déficit del 2020, sino que también servirá como un soporte, un apoyo importantísimo para el 2021 ya que viene a reducir las necesidades de financiamiento para el 2021”, recalcó Villegas.
El jerarca apuntó que en los próximos días se materializará el tema del ajuste fiscal y se irán analizando los alcances, no solo de la mesa de diálogo, sino medidas alternativas que no se concretaron ahí y que el mandatario, Carlos Alvarado, se comprometió para completar las iniciativas que el país requiere.
Una vez que se conozca ese plan, dijo el ministro, ese riesgo de refinanciamiento también se disipará.
Acciones recomendadas para Costa Rica
Según la organización, la prioridad a corto plazo debería seguir siendo reforzar el sistema de salud y focalizar el apoyo fiscal a los más golpeados por la recesión.
“La eliminación de exenciones fiscales regresivas y la mejora de la eficiencia del gasto público, inclusive a través de una reforma del empleo público, podrían brindar mayor espacio fiscal y sentar las bases para una estrategia fiscal a mediano plazo destinada a mantener la deuda pública en niveles sostenibles”, reseña la OCDE.
También considera que proseguir con la implantación de reformas estructurales, entre otras, las destinadas a fortalecer la competencia interna, es clave para respaldar la creación de empleo formal.
“Una estrategia integral para reducir la informalidad, que incluya la reducción de las contribuciones a la seguridad social para los trabajadores con bajos salarios, y construir una red de seguridad social para todos los trabajadores, combinada con mejoras en la calidad de la educación y la formación, promoverían un crecimiento más inclusivo” subrayó el ente.
Además concluyó que seguir desarrollando capacidades para la realización de pruebas y rastreo en todo el país ayudaría a atenuar el riesgo de que se produzcan nuevos brotes del virus.