París. La OCDE instó este miércoles 30 de mayo a evitar "una escalada" en las tensiones comerciales por temor a que afecten de manera significativa al crecimiento mundial.
Esta advertencia de la organización basada en París se produce a dos días del vencimiento de la exención temporal del pago de nuevos aranceles al aluminio y al acero que Estados Unidos concedió a algunos países como los de la Unión Europea, México, Canadá, Brasil y Argentina.
"La continuación de la escalada de tensiones comerciales podría golpear de manera significativa la expansión económica", advirtió la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que augura un crecimiento mundial cercano al 4%, el promedio de las décadas previas a la crisis.
"Primero y ante todo hay que evitar una escalada de las tensiones comerciales", insistió el jefe economista interino de la organización, Álvaro Pereira, sin citar ningún país específico, en un contexto en que Estados Unidos podría aplicar a partir del próximo viernes aranceles del 25% al acero y del 10% al aluminio importado.
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Si se confirma esta medida, los socios comerciales de Washington, empezando por la Unión Europea, podrían tomar medidas de represalia.
Estados Unidos anunció el martes que los preparativos para eventuales sanciones comerciales contra China continuaban, a pesar del anunció reciente de su administración de una tregua en la guerra comercial.
La OCDE, que celebra hasta el jueves su reunión anual en París bajo el lema "La reforma del multilateralismo, también está preocupada por la subida de los precios del petróleo y de las tasas de interés de países, grupos y hogares muy endeudados.
Esta advertencia llega en plena crisis política en Italia, que ha provocado caídas en varias bolsas europeas y el incremento de la prima de riesgo del país y de algunos de sus vecinos del sur de Europa.
Según datos de la OCDE, que no cita específicamente esta crisis en sus previsiones, Italia debería crecer un 1,4% este año y un 1,1% en 2019.
La organización revisó ligeramente a la baja sus previsiones para el crecimiento mundial este año, al 3,8%, frente a su previsión de 3,9% en marzo, dejando sin cambios sus previsiones para el año que viene (3,9%).
Para la economía estadounidense, que está viviendo uno de los ciclos de crecimiento más largos de su historia, la OCDE prevé ahora un aumento del producto interior bruto (PIB) del 2,9% este año y del 2,8% el próximo, sin cambios en relación con sus anteriores previsiones en marzo.
Por otra parte, la OCDE revisó al alza sus previsiones de crecimiento para España (2,8% este año y 2,4% en 2019, frente a al 2,3% y el 2,1% anteriores), y advierte de que, aunque la recuperación sigue siendo sólida y equilibrada, la deuda pública sigue siendo alta y son necesarias más reformas para sostener el crecimiento.
En su informe, la OCDE también evalúa las economías de algunos países no miembros, como Argentina, marcada por la reciente crisis del peso, que la organización atribuye a un contexto de descenso de la confianza y de fuga de capitales. Para el 2018 el informe prevé un crecimiento del 2% y de un 2,6% en el 2019.
En el caso de Brasil, el informe apunta a un crecimiento del 2% en el 2018 y del 2,8% en un contexto de sólido crecimiento de las inversiones, reflejo, según la organización, de los recientes esfuerzos de reforma, incluso en los mercados financieros.