La diplomacia será la principal herramienta para que Costa Rica mantenga relaciones económicas fluidas con Estados Unidos, su mayor socio comercial, en caso de un triunfo del Partido Republicano en las próximas elecciones presidenciales, señalaron analistas.
La relevancia de estas relaciones se destaca en el ámbito comercial: hasta setiembre, las exportaciones hacia Estados Unidos alcanzaron $6.807,6 millones, representando el 47% del total de las colocaciones al exterior. Además, esta cifra refleja un aumento del 11,6% respecto al mismo periodo del año pasado.
Los resultados de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, previstas para el 5 de noviembre, son inciertos. Las encuestas no muestran un ganador claro, y Costa Rica sigue atenta, ya que el próximo inquilino de la Casa Blanca definirá el rumbo de las relaciones económicas entre ambos países.
El 2 de noviembre, tres días antes de las elecciones, una encuesta de The New York Times colocó a Kamala Harris un punto por encima de Donald Trump (49% y 48% respectivamente). Quizás sea el único punto en que los datos los acercan, ya que Harris y Trump, con 18 años de diferencia, nacieron en ciudades distantes por 4.700 kilómetros: ella en Oakland, California; él en Queens, Nueva York, en ambos extremos del país, aunque suene irónico.
El proteccionismo económico de Trump es una de sus características más evidentes, señala el economista Arturo Cruz Sequeira, catedrático del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (Incae). Su éxito, añade, radica en que ha apelado a sectores en Estados Unidos que se sienten desplazados por la globalización.
Cruz indica que Trump invoca la nostalgia de una economía cerrada, como en los años 1950, cuando solo el 8% estaba vinculado al comercio mundial. Aunque preocupa que Trump busque renegociar el Cafta con reglas de origen más estrictas, Costa Rica sería el país menos afectado por haber construido una relación especial con Estados Unidos.
“Costa Rica dependerá de su habilidad diplomática para mantener esa relación especial construida a lo largo de los años. Es una democracia fuerte y ejemplar en una región cada vez más inhóspita al modelo democrático y tiene mucho que ofrecer en términos de mano de obra calificada”, apuntó Cruz.
LEA MÁS: FMI mantiene proyección de crecimiento económico para Costa Rica en 2024
Cruz también estima que, si Trump establece aranceles a China, esto podría beneficiar a Centroamérica, ya que el país asiático podría voltear su mirada hacia la región para instalar fábricas y cumplir con las reglas de origen de estos países. “Pero Costa Rica está en otra liga; no atraerá inversión que genere empleos de bajo valor agregado", aseguró.
En Costa Rica, casi 1.000 empresas de inversión extranjera operan en sectores como servicios, comercio, manufactura, dispositivos médicos, agroindustria, turismo y administración de parques; de estas, el 45% son estadounidenses, según datos de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).
El excanciller Rodolfo Solano, destaca que las relaciones con Estados Unidos son estratégicas y se basan en valores compartidos como el respeto al derecho internacional, la democracia, los derechos humanos y la libertad de expresión. En caso de un triunfo de Harris, se espera la continuidad en las instituciones de interés para Costa Rica, como el Departamento de Comercio y el Departamento de Estado.
Con la elección de Trump, Solano prevé cambios radicales en los funcionarios de estas instituciones, lo cual requerirá que el Gobierno costarricense implemente una estrategia “inteligente” de interlocución con el Congreso para asegurar la continuidad de planes de desarrollo y seguridad, basado en la capacidad diplomática demostrada por el país.
Solano destacó que en 2025 Costa Rica tendrá dos ventajas en el ámbito internacional: asumirá la presidencia del Consejo de Ministros de la OCDE y será sede de la Cumbre de la Alianza de las Américas. Ambos eventos son oportunidades para fortalecer su liderazgo regional.
Solano no ve mayores riesgos en los resultados de las elecciones siempre que se desarrollen estrategias de cabildeo y se fortalezca la estructura interna para atraer inversiones, modernizar la infraestructura logística y priorizar la capacitación del talento humano.
Alianza con beneficios
El consultor internacional Roberto Artavia, recordó que durante la década de 1980 Costa Rica jugó un papel relevante en Centroamérica en el contexto de la Guerra Fría, lo que le permitió el respaldo de Estados Unidos para la reestructuración económica del país, mediante iniciativas como la Iniciativa de la Cuenca del Caribe (CBI), el establecimiento del Incae con el respaldo financiero de la Agencia Internacional para el Desarrollo (AID) y las inversiones para promover las exportaciones no tradicionales, entre otros.
“Costa Rica fue escogido para ser la línea de contención del avance del izquierdismo en la región", afirmó Artavia, lo cual fortaleció las relaciones con Estados Unidos, hasta ubicarse como el principal socio comercial y destino de inversión extranjera en la región. A su juicio, esto podría estar en riesgo si Trump regresa al gobierno debido a su carácter proteccionista.
Para Artavia, la mayor implicación de un triunfo de Trump sería el cuestionamiento formal al modelo democrático, que Costa Rica tiene afianzado. Además, señaló que las políticas migratorias de Trump afectarían a Costa Rica porque los países vecinos dependen de las remesas, que representan entre el 15% y el 27% del producto interno bruto (PIB) en estas economías. “A Costa Rica le conviene un gobierno de Harris y no de Trump”.
La conveniencia de Harris para Costa Rica
El apoyo de Estados Unidos a las instituciones internacionales que respaldan la seguridad geopolítica global, así como el mantenimiento de las políticas comerciales y de inversión, son los aspectos que Rodrigo Cubero, expresidente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), destaca de un gobierno demócrata en Estados Unidos.
En contraste, considera que un mandato de Trump implicaría un cambio radical que pondría en riesgo a Costa Rica. “Con Harris se esperan políticas de continuidad favorables; con Trump tendríamos un cambio que no sería bueno para Costa Rica y el mundo", indicó Cubero.
El economista Víctor Umaña ve en Harris la continuidad de la política económica de Biden, que ha generado estabilidad macroeconómica y fomentado la inversión en Estados Unidos, creando un efecto positivo para Costa Rica. En cambio, las intenciones de Trump ponen en riesgo iniciativas como la Chips Act. Umaña opina que, durante su primera administración (2017-2021), Trump tuvo restricciones del Congreso para implementar sus políticas proteccionistas, pero duda que ahora evite conflictos comerciales con China y la Unión Europea.
Por ello, Umaña advierte sobre el riesgo de barreras a las exportaciones y la suspensión de programas de fomento a la inversión. “Somos aliados de Estados Unidos en todo; se esperaría que Costa Rica no sea un blanco directo, pero indirectamente podría verse afectada. Con Harris habría continuidad y fortalecimiento de programas como la Ley de Chips y Ciencias (Chips Act), lo cual conviene a Costa Rica”.
LEA MÁS: Banco Central eleva proyección de crecimiento económico a 4,1% en 2024
Josué Fernández, decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Ulacit, subrayó que la Chips Act ha beneficiado la industria de semiconductores en Costa Rica. Aun cuando esta ley fue aprobada por el Congreso, Trump podría plantear aranceles que afectarían la continuidad del nearshoring y revisar acuerdos comerciales vigentes, poniendo en riesgo el flujo comercial debido a su enfoque proteccionista.
“Un gobierno demócrata podría resultar más beneficioso para Costa Rica en términos de apertura comercial y relaciones bilaterales”, indicó Fernández.
Garantizar la alianza con Estados Unidos
El exministro de Hacienda Elian Villegas, opina que quien gane las elecciones enfrentará un panorama global complicado. Recomienda que Costa Rica decida qué área priorizar en la alianza con Estados Unidos, ya sea en el fortalecimiento de la democracia o en el apoyo a empresas que fortalezcan el encadenamiento productivo en las zonas francas, por ejemplo.
“Sea quien gane, a Costa Rica le corresponde actuar inteligentemente, llevar la vanguardia en la relación y buscar beneficios bilaterales”, opinó Villegas.
En términos similares, Juan Carlos Chavaría, presidente de AmCham Costa Rica respondió que, independientemente del resultado electoral, ambos países mantendrán su compromiso de fortalecer la cooperación bilateral y promover un entorno favorable para la inversión.