Nuevos países, entre ellos México, anunciaron el viernes la llegada de la variante ómicron del coronavirus que aunque todavía no ha causado muertes según la OMS, provocó múltiples restricciones que amenazan el crecimiento económico.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, indicó que la nueva variante puede desacelerar la recuperación y forzar al organismo a revisar a la baja sus proyecciones económicas globales.
“Una nueva variante que puede expandirse rápidamente puede hacer mella en la confianza y en este sentido, probablemente veremos recortes sobre nuestras proyecciones de octubre sobre crecimiento global”, señaló.
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En esa última estimación, el FMI ya había recortado su optimismo, estimando un crecimiento del PIB mundial del 5,9% en 2021 en vez del 6% anterior. Para 2022, esperan un progreso del 4,9%.
Más de una semana después de que Sudáfrica anunciara su detección, la nueva variante ya ha sido registrada en 38 países y ha hecho cundir el pánico en numerosos gobiernos, que endurecieron medidas sanitarias y cerraron fronteras.
Al mismo tiempo, la pandemia de la COVID-19 sigue causando estragos en numerosos países: Rusia registró en octubre su mes más mortífero desde la pandemia, con 74.893 muertes relacionadas con el virus, indicó la agencia de estadísticas Rosstat. En total, el número de decesos supera los 520.000.
En todo el Espacio Económico Europeo (Unión Europea más Noruega, Islandia y Liechtenstein) se habían notificado 109 casos de ómicron hasta el mediodía del viernes, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC).
Además, varios países como España, Estados Unidos o Australia empezaron a señalar casos de presunta transmisión local, con pacientes infectados que no habían viajado al extranjero.
Túnez y México anunciaron el viernes sus primeros casos y el subsecretario mexicano de Salud, Hugo López-Gatell, aprovechó la ocasión para denunciar que el cierre de fronteras no es una medida útil para contener las variantes.
La aparición de esta variante es “la prueba definitiva” del peligro de las desigualdades, declaró a la AFP el presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), Francesco Rocca, que recordó la amenaza de ver “variantes muy nuevas en lugares donde la tasa de vacunación es muy baja”.
Aunque la nueva variante parece ser altamente contagiosa, un portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Christian Lindmeier, dijo el viernes que no había recibido “ningún informe de muertes relacionadas con ómicron”.
A medida que más países hagan pruebas para detectar la nueva variante, “tendremos más casos, más información y —aunque espero que no— posiblemente muertes”, dijo.
Existen también dudas sobre la peligrosidad y la resistencia a las vacunas de ómicron que, según la OMS, ya está extendida en las seis regiones en las que divide su actividad la organización sanitaria.
En Sudáfrica, la nueva variante ya es prevalente y las autoridades sanitarias han informado de un aumento de las infecciones en los niños, aunque todavía no se sabe si está relacionado con ómicron.
Un estudio de ese país indicó que el riesgo de volver a contraer el COVID-19 es tres veces mayor con ómicron que con las variantes beta y delta.
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Pánico y restricciones
Desde la aparición de la contagiosa delta, ahora dominante en el mundo, una variante de COVID-19 no había causado tanto pánico, con una avalancha de medidas y restricciones de viaje en todo el mundo.
Irlanda anunció el viernes por la noche varias medidas, entre ellas el cierre de discotecas del 7 de diciembre al 9 de enero. La ciudad brasileña de Sao Paulo suspendió las festividades de año nuevo y Alemania impuso fuertes restricciones a las personas no vacunadas, que estarán prácticamente confinadas.
Los diputados alemanes abordarán próximamente una votación para hacer obligatoria la vacunación, como ya ha hecho Austria, que volvió a confinar su población. Y en Grecia, acortaron el plazo para la tercera dosis de refuerzo.
En Asia, un día después de que Singapur anunciara dos casos, las vecinas Malasia y Sri Lanka notificaron el viernes sus primeros casos en viajeros que regresaban de África.
Por el momento, el Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que la cobertura de vacunación y los niveles de detección inadecuados, especialmente en África, es un “cóctel tóxico” para la “reproducción e incremento de variantes”.
Varias compañías, como Moderna, AstraZeneca, Pfizer/BioNTech y Novavax, han expresado su confianza en su capacidad para crear una vacuna contra ómicron.
Rusia también está trabajando en una versión de su Sputnik V dirigida específicamente a esta variante.
El COVID-19 ha matado al menos a 5.233.111 personas en todo el mundo y ha infectado a casi 265 millones de personas desde finales de 2019, según un recuento de AFP.