Prival Bank presentó, este jueves, a la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) la autorización de un proceso de cese voluntario de operaciones de intermediación financiera, lo cual significa que la institución saldrá del negocio bancario en Costa Rica.
La decisión se argumentó en un cambio en el modelo de actividad empresarial, pues ahora se centrará en actividades de intermediación bursátil y de administración de fondos de inversión. Esto quiere decir que mantendrán la operación normal en el mercado nacional de Prival Securities Puesto de Bolsa y Prival SAFI.
La decisión se tomó en la Asamblea General Ordinaria y Extraordinaria de Accionistas, el 30 de enero pasado, según informó la Sugef en un comunicado de prensa.
La Superintendencia detalló que la entidad presentó una propuesta de cronograma, la cual deberá revisarse para emitir la autorización respectiva.
“Este tipo de acciones son totalmente normales, ya que los mercados financieros a nivel global son altamente dinámicos y tienden a reacomodarse de cara las necesidades de los consumidores financieros y a la dinámica de negocio que quieran asumir las entidades para atenderles”, aseguró Hazel Valverde, jerarca de la Sugef.
El año pasado, Coopamistad y Coopelecheros también dejaron la actividad de intermediación financiera.
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A enero pasado, Prival Bank registró un activo total de ¢35.962 millones, de los cuales ¢9.637 millones corresponden a la cartera de crédito, según datos de Sugef.
En el 2024, el banco privado tuvo una ganancia de ¢513 millones y logró revertir una pérdida de ¢1.582 millones del 2023.
Gabriela Vargas, vicepresidenta de Finanzas Regional de Prival, dijo a La Nación en enero pasado que el resultado negativo de 2023 se debió a una caída en el tipo de cambio. Sin embargo, el año pasado se implementaron coberturas cambiarias que redujeron el riesgo y neutralizaron el impacto de la valoración en el negocio del banco.
En el 2023, la entidad tuvo una fuerte reducción de su cartera de crédito, que era su principal activo. En ese año, cerró con un saldo de ¢13.261 millones, frente a los ¢31.861 millones del año previo. La entidad vendió parte de sus préstamos para ayudar a reducir el pasivo, según informó La Nación.
Sergio Ruiz, gerente general de Prival Bank, explicó en ese momento que se aplicó un cambio en la estrategia para mitigar el riesgo dentro del balance financiero al disminuir la exposición en créditos que pueden impactar en provisiones o incobrabilidad. También influyó, añadió, que el banco mantiene una posición en moneda extranjera larga, es decir, su patrimonio se encuentra muy dolarizado.
“Con la estrategia de mejora de calidad de cartera se ha realizado una gestión de calidad de clientes y disminución de posiciones en operaciones que provoca la mejora en el monto de mora”, expresó Ruiz.
Grupo Prival, de capital panameño, ingresó al mercado costarricense, en el 2015, cuando adquirió el 100% de las acciones del Banco de Soluciones Bansol de Costa Rica S. A. (Bansol).
Acuerdo unánime
Prival Bank publicó este jueves un hecho relevante en el cual informó que, el pasado 15 de enero, la Junta Directiva de la entidad acordó por unanimidad y en firme pedir la desincripción como intermediario financiero y emisor de valores en el país.
El gerente general del banco será quien se encargará del proceso de coordinación y presentación de los cronogramas del plan del cese de operaciones.
La Directiva de Prival Bank tiene como presidente a Juan Carlos Fabrega Roux y como vicepresidente y representante legal a Jack Loeb Casanova.
Colaboró el periodista Gustavo Ortega.