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La Cámara Costarricense Automotriz asegura que la concesionaria Riteve SyC debería tener entre sus obligaciones, el verificar si el odómetro (contador de kilómetros) de un vehículo ha sido alterado, si el número de vin coincide con el titulo de propiedad, y hasta anotar si los vehículos pertenecen a una empresa de alquiler de carros.
Los señalamiento por parte de la Cámara responden a la necesidad de darle al consumidor mayores herramientas para que conozca a fondo el vehículo que se está adquiriendo y a la obligación por parte del gobierno de hacer cumplir la misma Ley de Tránsito. Sin embargo la Asociación Costarricense de Auto Rentistas (ACAR) y la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) se oponen a la medida.
Jose Carballo, presidente de la Cámara Automotriz, fue enfático en que estas peticiones se las hicieron directamente al Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) desde el año 2013, sin haber obtenido respuesta alguna a la fecha.
Carballo manifestó en que el comprador de un vehículo desconoce el verdadero recorrido del auto a nivel local, pues no existe un control que asegure los kilómetros recorridos de un automotor.
En la Ley. En el artículo 122, inciso b, de la Ley de Tránsito, se prohibe la circulación de un carro con el odómetro modificado, control que a su criterio solo recae en manos de los mismos particulares.
"Este control lo debe de llevar Riteve, cada vez que el auto va a inspección se debe anotar en la hoja los kilómetros con lo que llegó a revisión el vehículo. Es una exigencia de la ley pero nadie lo controla", comentó.
Adicionalmente según la legislación actual en su articulo 10, es obligación de Riteve el servir como filtro en la verificación del número de vin de un vehículo. Este número se compone de 17 dígitos y forma parte de las características esenciales a la hora de inscribir un carro en el Registro Nacional. Controlarlo permitiría que un vehículo robado o gemeleado sea descubierto.
Como último punto, el gremio sugiere que Riteve haga una anotación especial a aquellos autos catalogados como pérdida total o que han sido utilizados en las empresas de alquiler de vehículos.
"Hoy, para saber que un carro es de rent a car, por ejemplo, el futuro propietario debe de hacer un estudio registral exahustivo para darse cuenta, no hay otra forma. Y no secreto para nadie el desgaste de estos vehículos y de su depreciación en el mercado", agregó Carballo.
"Queremos un mercado automotriz transparente, donde el consumidor se sienta protegido de su inversión por parte del estado, no entendemos porque estas medidas no se han hecho efectivas al día de hoy", concluyó.
Criterios en contra. Las solicitudes de la Cámara, aun sin ser aprobadas por las autoridades, ya ganaron opositores. La Asociación Costarricense de Auto Rentistas (ACAR) y la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), son algunos de los oponentes.
Federico Barquero, presidente de Acar, manifestó que el planteamiento de una anotación especial en la hoja de Riteve de un vehículo, utilizado por agencia, carece de todo sentido y "desprestigia la calidad de la flotilla de los rent a car del país.
"Los vehículos de alquiler siguen protocolos de mantenimiento establecidos por los mismos fabricantes de autos. Contrario a lo que mucha gente piensa, los vehículos de alquiler normalmente están en mucho mejores condiciones que los vehículos de terceros, y hasta algunos casos con menor kilometraje", dijo Barquero.
Canatur respalda a Acar y agrega, que si el servicio que recibe un turista es de calidad y satisface la demanda, un nacional debería estar confiado en el producto que eventualmente podría adquirir.
Se trató de localizar al Ministro de Obras Públicas, Carlos Segnini, para obtener su posición ante las medidas sugeridas; sin embargo, su asesora indicó que se podría referir al tema hasta el próximo lunes 16 de junio.
