A menos de una semana para el próximo 1.° de mayo, los diputados de la actual conformación de la Asamblea Legislativa se preparan para realizar su cuarta y última votación por la presidencia del Congreso.
Rodrigo Arias, del Partido Liberación Nacional (PLN), ganó las últimas tres contiendas y aspira nuevamente por el cargo. Lo hace a pesar de la oposición explícita del presidente Rodrigo Chaves, quien incluso ha dicho que desistirá de nombrar a cualquier nuevo ministro o ministra de la Presidencia, mientras Arias sea quien dirija en el Poder Legislativo.
¿Cuán probable es que Arias repita en el cargo por cuarto año consecutivo como presidente de la Asamblea?, ¿siquiera tiene oposición? Así se han movido las piezas del tablero hasta este momento.
¿Quiénes aspiran por la presidencia?
Hasta ahora —porque es algo que puede cambiar en cualquier momento— se conocen las intenciones de tres diputados de aspirar por la presidencia de la Asamblea Legislativa para el período 2025-2026.
Uno es Rodrigo Arias, quien ha sido presidente del Congreso durante el período 2022-2025.
Los otros dos son Rosalía Brown, del Partido Nueva República (PNR), quien actualmente se desempeña como vicepresidenta del parlamento; así como el oficialista Manuel Morales, quien ya se postuló el año pasado sin éxito.
La diputada Vanessa Castro, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), también había manifestado su intención de impulsar una candidatura. Sin embargo, este 24 de abril informó de que decidió desistir, al constatar que no contaba con el apoyo de su propia fracción.
¿Qué se necesita para ganar la votación?
Para ganar la elección por la presidencia legislativa, cualquier diputado requiere de al menos 29 votos de entre los 57 legisladores del Congreso. Es decir, de la mayoría.
Un candidato también puede ganar con un respaldo menor, en las votaciones de desempate, donde solo participan los dos candidatos o candidatas con más votos. En esas votaciones, los votos nulos se suman al candidato que lleve la delantera, si se tiene que llegar a ese punto.
Una nota de contexto: Arias obtuvo 50 votos a favor de su candidatura en 2022, 44 en 2023 y 36 en 2024. La tendencia ha sido descendente, pero los números le han alcanzado de sobra en todas las elecciones de este período constitucional, al menos hasta ahora.
¿Cuán cerca está cada candidato?
De entrada, Rodrigo Arias parte con la delantera. El liberacionista ya tiene el respaldo de 17 de los 19 diputados del PLN; los cuales se comprometieron a apoyar a su compañero de bancada. Gilberth Jiménez y Carolina Delgado no se comprometieron con él. El primero aseguró que votaría por sí mismo, mientras que la segunda no ha confirmado ninguna decisión todavía.
En tanto, Rosalía Brown y Manuel Morales representan a grupos más pequeños. Brown es parte de Nueva República, una bancada que únicamente cuenta con seis congresistas; mientras que los diputados afines al gobierno son solo ocho.
¿Y el resto de los votos?
La situación también parece inclinarse en favor de Arias, aunque todavía no de forma definitiva.
La diputada socialcristiana Vanessa Castro anunció este jueves que se retiraba de la disputa por la presidencia del Congreso, luego de que sus compañeros de la fracción del PUSC acordaron negociar en favor de la candidatura de Arias a cambio de otros puestos en el Directorio del Congreso.
La bancada de la Unidad está compuesta por nueve congresistas.
Asimismo, la diputada independiente Gloria Navas ya anunció su respaldo a Arias, y el liberacionista también está negociando con los tres diputados del Partido Liberal Progresista y con las cinco diputadas independientes adicionales.
En los casos de Brown y de Morales, no se han anunciado mayores adhesiones a favor suyo. Morales, que recién anunció sus intenciones, incluso aseguró a radio Columbia comprender que “ya hay negociaciones” en curso y que “parece que todo tiende al voto hacia Rodrigo Arias”.
Los diputados del Frente Amplio (FA), por otra parte, siempre han votado por algún miembro de su propia fracción en las tres elecciones previas hasta ahora. En esta ocasión habían manifestado su anuencia en favor de la candidatura de Vanessa Castro, pero el retiro de la socialcristiana modifica el escenario.
Los frenteamplistas son los únicos que diputados que han votado en contra de las candidaturas del liberacionista Rodrigo Arias desde un inicio, en 2022; pero tampoco comparten mayores afinidades con el Gobierno ni con Nueva República.
¿Qué opina el Gobierno?
El presidente Rodrigo Chaves y su gobierno se oponen abiertamente a la reelección de Arias como presidente del Congreso.
Chaves incluso aseguró este 23 de abril, en el acto de divulgación de informaciones de la Presidencia de todos los miércoles, que “no puede pensar en un peor presidente para la Asamblea Legislativa”.
Los diputados afines al gobierno respaldaron a Arias en 2022 y 2023; sin embargo, hubo un quiebre a partir de 2024, conforme el liberacionista realizó manifestaciones cada vez más críticas con el mandatario y su administración.
El presidente Chaves dijo que, si bien respaldó la elección de Arias en ocasiones anteriores, considera que “el hombre se fue en mentiras, humo y promesas quebradas”, aunque no ahondó en ello.
¿Qué más se decide el 1.° de mayo?
Además de la elección por la presidencia del Congreso, los diputados también tendrán que votar este 1.° de mayo por las personas que ocuparán otros cinco cargos al mando de la Asamblea Legislativa.
Hablamos de:
— La vicepresidencia legislativa
— La primera secretaría
— La segunda secretaría
— La primera prosecretaría
— La segunda prosecretaría
Además de dirigir el Congreso, las personas seleccionadas en estos cargos tienen diversas funciones administrativas, por ejemplo, en materia de ratificación de nombramientos.
El presidente y los dos secretarios se desempeñan como propietarios, mientras que el vicepresidente y los prosecretarios lo hacen en condición de suplentes.
Sin embargo, la remuneración de todos los legisladores en estos cargos es igual a la del resto de congresistas.
¿Qué va a pasar finalmente el próximo jueves? Si gana Arias (el escenario que parece más probable hasta el momento), será el segundo presidente legislativo desde 1949 que se mantenga en el cargo por cuatro años. Antes solo lo logró el liberacionista Francisco Antonio Pacheco, entre 2006 y 2010. Pero, si pierde, estaremos frente a un giro inesperado de la actual conformación legislativa, que hasta ahora no se ha caracterizado por protagonizar grandes sorpresas.