Washington.
El presidente Barack Obama dijo el viernes que un misil disparado desde el territorio ucraniano controlado por los rebeldes prorrusos derribó al jet malasio de pasajeros y confirmó que un estadounidense se encontraba entre las víctimas.
"Sus muertes son un ultraje de proporciones indecibles", dijo Obama a los periodistas y presionó por la realización de una investigación internacional para determinar los autores del disparo.
"La evidencia indica que el avión fue derribado por un misil tierra-aire lanzado desde un área en Ucrania controlada por separatistas apoyados por Rusia", expresó Obama.
El mandatario dijo estar a la espera de toda la información, destacó que los rebeldes prorrusos ya han derribado aparatos ucranianos.
El mandatario estadounidense, que al inicio de la semana había impuesto nuevas sanciones a Rusia a causa del conflicto, llamó al presidente Vladimir Putin a "tomar el camino que lleve a la paz en Ucrania".
"Creo que es importante reconocer que este ultrajante evento muestra que es hora de restablecer la paz y la seguridad en Ucrania. Ahora es, creo, un tiempo sombrío, apropiado para que todos reflexionemos y analicemos lo que ha sucedido. La violencia y el conflicto tienen inevitablemente consecuencias imprevisibles", manifestó.
El mandatario agregó que el derribo del avión es un "llamado de atención" para Europa sobre Rusia.
"Esto será seguramente una señal de alarma para Europa y el mundo sobre el hecho de que un agravamiento del conflicto en el este de Ucrania tendrá consecuencias", declaró Obama.
Obama afirmó que el ciudadano estadounidense iba a bordo del avión de Malaysia Airlines siniestrado este jueves en el este de Ucrania, y envió sus condolencias a sus familiares.
"Sabemos que al menos un ciudadano estadounidense, Quinn Lucas Shantzman, fue asesinado. Nuestros pensamientos y oraciones están con su familia por esta terrible pérdida", dijo Obama en una declaración desde la sala de prensa de la Casa Blanca.
Shantzman tenía la doble nacionalidad estadounidense y holandesa, según precisó el Departamento de Estado.
"Casi 300 vidas inocentes fueron arrebatadas, hombres, mujeres, niños, que no tenían nada que ver con la crisis en Ucrania. Sus muertes son una tragedia de dimensiones inefables", indicó Obama.
El Boeing-777 de Malaysia Airlines se estrelló en la región oriental de Donetsk, escenario de combates entre las fuerzas gubernamentales de Ucrania y los rebeldes prorrusos, quienes nada más producirse el siniestro se acusaron mutuamente de ser responsables del derribo del aparato.
En tanto, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunió este viernes para debatir sobre lo acontecido en Ucrania.
La diplomática Samantha Power, que habló ante el Consejo de Seguridad reunido de urgencia, se refirió a un misil Buk de tipo SA-11 y recordó que el jueves por la mañana se hallaron separatistas prorrusos con este tipo de sistema de defensa antiaérea cerca del lugar donde cayó el avión.
El embajador británico, Mark Lyall Grant, dijo más temprano que hay indicios que muestran que el avión fue derribado por un misil tierra-aire.
Estados Unidos "no tiene conocimiento de la presencia de un sistema de misiles SAM (misil tierra-aire) ucraniano en la zona", agregó Power, al recordar que desde el inicio del conflicto la defensa antiaérea ucraniana no lanzó misiles.
Según Power, dada la complejidad técnica del sistema de misiles en manos de los separatistas prorrusos, Estados Unidos "no descarta asistencia técnica por parte del personal ruso" a los rebeldes.