El izquierdista Luiz Inacio Lula da Silva, afirmó ayer que Brasil no va a quebrar.
"Brasil no quiebra, ya salimos de crisis peores", aseguró ayer, en conferencia de prensa, al referirse a la abultada deuda externa ($260.000 millones).
"Es con esa convicción que vamos a ganar estas elecciones y que gobernaremos Brasil", continuó el candidato del Partido de los Trabajadores (PT).
Al referirse a la fuerte devaluación del real, de un 40 por ciento este año, Lula la atribuyó al contexto internacional y a "una mezcla de algunos bancos extranjeros con bancos brasileños que intentan hacer de la especulación una forma de ganar dinero fácil".
"Pueden tener la seguridad de que, si ganamos, la especulación va a disminuir en este país, porque haremos un esfuerzo muy grande para que la producción sea la razón de la inversión", añadió.
Sobre política internacional, Lula criticó a quienes hacen hincapié en su relación con Fidel Castro y Hugo Chávez.
"No tenemos preferencias en nuestras relaciones internacionales. Queremos mantener las mejores relaciones diplomáticas con todos los países, incluso con Estados Unidos".
Líder histórico del Partido de los Trabajadores, Lula fue tres veces candidato presidencial y perdió en 1989 contra Fernando Collor de Mello y en 1994 y 1998 contra Fernando Henrique Cardoso.