Ciudad del Vaticano. El papa Francisco dijo el domingo que está “preocupado” y “entristecido” por la situación en Nicaragua, especialmente por el obispo Rolando Álvarez, condenado a 26 años de cárcel, y por la deportación de 222 opositores a Estados Unidos.
El gobierno de Daniel Ortega liberó el jueves a 222 opositores y los deportó a Estados Unidos, despojados de su nacionalidad. El obispo Rolando Álvarez, que se negó a ser deportado, fue condenado el viernes a 26 años de cárcel por, entre otros cargos, menoscabo a la integridad nacional.
"Las noticias que llegan de Nicaragua me han entristecido mucho", dijo el pontífice argentino al final de su tradicional oración del Ángelus, en la plaza de San Pedro.
"No puedo dejar de recordar con preocupación al obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, a quien quiero tanto", agregó, y "también a las personas que han sido deportadas a Estados Unidos".
Francisco dijo rezar por todos ellos y "por quienes sufren en esa querida nación".
El pontífice instó a los responsables políticos a seguir la senda de “la búsqueda sincera de la paz, que nace de la verdad, la justicia, la libertad y el amor, y se alcanza mediante el ejercicio paciente del diálogo”.
Cardenal pide orar por Álvarez
También este domingo, el cardenal nicaragüense Leopoldo Brenes pidió rezar por Rolando Álvarez.
“Alguien me decía: ¿Qué podemos hacer por monseñor Rolando (Álvarez)? Orar, esa es la fuerza nuestra, orar para que el señor le dé la fortaleza, le dé el discernimiento en todas sus acciones”, dijo Brenes al final de la misa que realizó en la Catedral de Managua.
Brenes, quien también funge como arzobispo de Managua, pidió también en su breve mensaje que “no exista odio ni rencor” porque el cristiano “tiene que amar y tiene que perdonar intensamente”, agregó.
Antes de la misa, el cardenal manifestó a periodistas que la Iglesia acompaña tanto a Álvarez como a los 222 opositores excarcelados y desterrados el jueves a Estados Unidos.
“Ustedes escucharon los sentimientos de ellos al llegar allá, que se sentían felices. Los seguimos acompañando como lo hemos hecho a través de la oración”, manifestó Brenes.
Entre los 222 opositores nicaragüenses excarcelados figuran la exprecandidata presidencial Cristiana Chamorro y su hermano y exministro Pedro Joaquín Chamorro, así como otros políticos que pretendían desafiar a Ortega en los últimos comicios.
También fueron liberados y expulsados a Estados Unidos otros dos integrantes de la familia Chamorro ligados al diario La Prensa, que ahora se edita en internet en el exilio, y la excomandante guerrillera Dora María Téllez.
El jueves, al anunciar la medida, Ortega dijo que el obispo de Matagalpa, de 56 años y detenido desde agosto por conspiración, rechazó marcharse a Estados Unidos con el grupo de excarcelados.
El presidente indicó que una decena de sacerdotes, diáconos y seminaristas abordó voluntariamente el vuelo que llevó a 222 opositores excarcelados y que ahora sólo quedan tres religiosos presos en Nicaragua: dos sacerdotes “por delitos comunes” y el obispo por “terrorismo”.