El expresidente Álvaro Uribe impulsa a partir de este sábado una campaña de recolección de firmas en Colombia contra el acuerdo de paz que el gobierno está próximo a firmar con la guerrilla FARC.
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Al firmar la denominada "Proclama por la paz que queremos", en la plaza Botero del centro de Medellín, la segunda ciudad de Colombia, Uribe llamó a sus seguidores a refrendar el documento porque "muchos de los acuerdos de La Habana, y el plebiscito que pretende que el pueblo colombiano los ratifique, le hacen daño a la patria".
Esta iniciativa, respaldada por Uribe y su partido Centro Democrático, forma parte de una serie de acciones que el expresidente y actual senador ha dicho que hará en el marco de la "resistencia civil" al acuerdo de paz que el gobierno de Juan Manuel Santos espera firmar pronto en Cuba con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"¿A qué nos oponemos? ¿Qué nos preocupa? Que los acuerdos de La Habana y el plebiscito acepten que los integrantes de las FARC, responsables de secuestros, narcotráfico, de asesinatos de niños y reclutamiento de niños, no vayan un día a la cárcel y los puedan elegir" en cargos públicos, dijo Uribe ante medios y seguidores que se acercaron a firmar el documento.
"Muchos tenemos que decir 'queremos la paz, pero no aceptamos esa paz con impunidad, porque genera más violencia', por eso muchos colombianos acudiremos en estos dos meses a firmar esta carta", añadió el líder opositor.
Decenas de ciudadanos se acercaron a este punto y a otros tantos instalados en Medellín, Bogotá y otras ciudades del país, para firmar el documento que, según el Centro Democrático, será incorporado en "denuncias ante organismos internacionales" y en una "demanda de inconstitucionalidad" contra la legislación que blinda jurídicamente el acuerdo de paz.
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"Pite contra las FARC", "Pite contra los acuerdos de La Habana", "Pite contra Santos", decían algunas de las pancartas que mostraban los seguidores de Uribe en la plaza Botero, pidiendo a los conductores que respaldaran la actividad haciendo sonar sus bocinas.
La proclama exige también la renuncia de Santos si "no puede darle a Colombia la paz que queremos y merecemos" y asegura que los firmantes quieren una paz que no dé "concesiones al terrorismo que generen el riesgo de vivir la misma tragedia sufrida por la hermana Venezuela".
El conflicto armado colombiano, que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares, agentes del Estado y grupos narcotraficantes, ha dejado en más de medio siglo 260.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados.