Buenos Aires. AFP. Este fin de semana dejó a los argentinos sin su credo: el fútbol. Tampoco levanta pasiones que Los Pumas enfrenten a los Wallabies de Australia en el campeonato mundial de rugby. El dilema es saber si el domingo se conocerá quién será el próximo presidente de Argentina .
A esta primera vuelta, el oficialista Daniel Scioli, 58 años, llega con una estrecha ventaja en los sondeos sobre su principal rival, el opositor conservador Mauricio Macri (56), quien a su vez se impone sin gran diferencia sobre el tercero, Sergio Massa (43), de centroderecha.
El domingo, los tres quieren terminar con la batalla para reemplazar a la presidenta Cristina Fernández, en el poder desde el 2003, cuando llegó como primera dama de su ahora fallecido esposo y mandatario Néstor Kirchner (2003-2007).
Descendientes de inmigrantes italianos y de cuna acomodada, tampoco se diferenciaron sustancialmente en sus propuestas de mantener los logros del actual gobierno y cambiar lo que está mal, según dicen.
Scioli, que arañaba el 40% a una semana de los comicios, según los últimos sondeos, dio un golpe de efecto para sumar votos de la clase media al anunciar en el cierre de su campaña la eliminación de un impuesto a 600.000 trabajadores, lo que se traduciría de hecho en un aumento salarial.
La expectativa está en ver si Massa, que viene achicando diferencias, logrará arrebatarle el voto opositor a Macri.
En Argentina, hay presidente electo en primera vuelta si un aspirante saca 45% de los votos, o si obtiene 40% y al menos 10 puntos de diferencia con respecto al segundo. De lo contrario, habrá balotaje el 22 de noviembre.
“Vamos a votar a Scioli, pero desgarrados” y “con cara larga”, confesó a tres días de los comicios el director de la Biblioteca Nacional, Horacio González, dirigente de Carta Abierta , un grupo de intelectuales kirchneristas, y encendió la polémica.
Recelos con Scioli. La declaración, considerada inoportuna en el seno del Gobierno, expresó un sentimiento bastante extendido pero silenciado en el kirchnerismo “duro”, que mira con recelo al postulante ungido por la presidenta peronista de centroizquierda porque era el único aliado con oportunidades.
“Scioli es un gran interrogante”, dijo Pablo Knopoff, de Isonomía Consultores.
No obstante, Scioli se defiende de propios y ajenos: “Somos lo conocido y la gente no tiene ganas de hacer experimentos”, afirmó.
“¡Pero Sr. González! ¡Voten con sus convicciones! Nueva categoría: el voto desgarrado”, tuiteó con ironía el cineasta Juan José Campanella, ganador del Oscar a mejor película extranjera por El secreto de sus ojos en el 2010, quien indicó que apoya a Macri.
Campanella encendió Twitter al escribir: “Solo hay dos melodías, Kirchnerismo y Cambiemos. Todo lo demás es ruido”, dijo a favor de Macri.
Además de Campanella, Macri sumó otras celebridades locales como Susana Giménez, la histórica diva de la televisión argentina.
“Es un tipo trabajador, honesto, muy sencillo, educado y como presidente de (club de fútbol) Boca hizo un cambio radical”, afirmó Giménez..
A principios de mes Javier Mascherano, caudillo de la selección argentina de fútbol, compartió una tribuna con Macri en una charla sobre liderazgo en la alcaldía de Buenos Aires.
Pero el oficialismo, que dio gran impulso a la cultura, acapara simpatías, incluso entre roqueros como Andrés Calamaro y Fito Páez, pese al gusto de Scioli por su amigo Ricardo Montaner y Pimpinela.
Cerca de 200 artistas, entre ellos la actriz Cecilia Roth y la cineasta Lucía Puenzo, publicaron un aviso de apoyo a [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20151024_0009]]Daniel Scioli[[END:INLINEREF]] por su “compromiso de dar continuidad a las políticas” de Cristina Fernández.
El ídolo argentino Diego Maradona respaldó a Scioli, desde Dubái, donde vive.
“Votaré a favor de lo previsible, del que nos va a cuidar y defender mejor a todos los argentinos. Porque es confiable y siempre se comprometió con las necesidades de la gente”, escribió Maradona en su Facebook.
Massa criticó a sus adversarios por “querer embanderar” a los artistas, a los que “no hay que usar políticamente”, aunque organizó un homenaje al exestelar de Boca Juan Román Riquelme.
Carlos Tévez, la estrella recuperada de Boca tras 11 años en el exterior, afirmó que votará “en blanco”, evitando entorpecer sus buenos contactos con los candidatos.