La Paz
Bolivia espera la llegada del presidente Evo Morales en la noche del miércoles procedente de Viena, donde fue obligado a permanecer 13 horas después de que Francia, Italia, España y Portugal, le cerraran sus espacios aéreos, postura que luego revirtieron.
Organizaciones civiles afines a Morales preparan marchas de protesta este miércoles contra esos países europeos en varias ciudades bolivianas.
Los cuatro países europeos le cerraron el espacio aéreo, pues -según La Paz- sospechaban de que en el avión presidencial pudiera encontrarse el informático estadounidense prófugo Edward Snowden, lo que fue terminantemente negado por el gobierno boliviano.
Morales regresaba a La Paz desde Moscú, donde participó en una cumbre de países exportadores de gas natural, y en cuyo aeropuerto se encuentra desde hace 10 días, en tránsito, el informático estadounidense prófugo Edward Snowden.
Morales había defendido las filtraciones realizadas por el polémico excontratista de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense que develó un plan de espionaje mundial y se había declarado dispuesto a estudiar su solicitud de asilo, aunque precisó que aún no la recibió.
Tras renunciar a su solicitud de asilo a Rusia por las limitaciones que pretendía imponerle el presidente Vladimir Putin, Snowden solicitó asilo a 21 países. Sólo tres se declararon dispuesto a estudiarlo: Bolivia, Ecuador y Venezuela.
Austria dijo que se evidenció que Snowden no estaba en el avión boliviano, aunque éste no fue registrado por la policía de ese país.
"No soy un delincuente", afirmó Morales en el aeropuerto de la capital austríaca, según la Agencia Austria Press, antes de reiniciar su viaje a Bolivia, y considerar que detrás del temporal veto aéreo está la mano de Estados Unidos, país con el que mantiene tensas relaciones diplomáticas.
Morales se enteró en pleno vuelo de Moscú a La Paz que Portugal le negaba una escala técnica y luego que Francia, España e Italia le prohibían atravesar su espacio aéreo.
También dijo que convocarán a los cuatro embajadores de esos países a la cancillería.
El avión, un Dassault Falcon 900EX adquirido a mediados de 2010 por 38,7 millones de dólares, despegó poco antes de las 5:00 a. m., hora de Costa Rica, y retomó su plan de vuelo original, con escalas técnicas en las españolas Islas Canarias, en el océano Atlántico, y en la ciudad de Fortaleza, en el noreste de Brasil, para finalmente llegar a La Paz, un periplo que le demandará unas 15 horas, según explicación oficial.
La sorprendente medida de las cuatro naciones europeas provocó las protesta de Cuba, Venezuela, Ecuador, Argentina y Uruguay, así como del secretario general de la OEA, Miguel Insulza.
"Es todo muy humillante", dijo la mandataria argentina Cristina Kirchner por la red social Twitter, al hacer un relato de las conversaciones que mantuvo en la madrugada del miércoles con sus pares Rafael Correa de Ecuador, José Mujica de Uruguay y el propio Morales.
Insulza expresó su molestia por la actitud de Francia, Italia, España y Portugal y exigió explicaciones a sus gobiernos, según un comunicado del ente.
"Nada justifica una acción de tanto irrespeto por la más alta autoridad de un país", señaló Insulza en el texto, y agregó que "los países involucrados deben dar una explicación de las razones por las cuales tomaron esta decisión", que a su juicio "puso en riesgo la vida del primer mandatario de un país miembro de la OEA".
Mientras se espera en Bolivia a Morales, organizaciones indígenas progobiernistas anunciaron protestas en La Paz y varias ciudades del país, en repudio a lo sufrido por el jefe de Estado.
"Nosotros estamos indignados, se ha maltratado a nuestro presidente, se ha puesto en riesgo su vida", dijo a la televisora estatal Juanita Ancieta, dirigente de una organización de mujeres indígenas, al convocar a "marchas y protestas contra esos países".
El gobierno boliviano anunció que demandará ante instancias de Naciones Unidas a los países responsables de prohibir el uso de sus espacios aéreos.
"Como gobierno estamos llevando adelante toda las denuncias a nivel internacional. Ya hemos hecho la denuncia ante las Naciones Unidas y en las siguientes horas estamos haciendo la denuncia ante el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos", dijo el vicepresidente Álvaro García en conferencia de prensa en La Paz.
Explicó que el objetivo de las medidas es "iniciar un proceso a los responsables de esa violación del derecho internacional, por esta violación al derecho aéreo y por esta puesta en riesgo de la vida del presidente, al prohibirle pasar por territorio de algunos países europeos que ni en tiempo de guerra sucede".