Quito. Un candidato presidencial y un alcalde denunciaron este sábado que se vieron afectados por balaceras registradas horas antes de las elecciones generales anticipadas de este domingo en Ecuador, un país que sufre la violencia relacionada con el narcotráfico y donde un candidato presidencial fue asesinado hace 10 días.
El aspirante de derecha, Otto Sonnenholzner, denunció en su cuenta de X (antes conocida como Twitter) que él y su familia sufrieron “una balacera frente al lugar donde estaban desayunando” en el puerto de Guayaquil, ubicado en el suroeste del país, sin reportar víctimas.
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“Gracias a Dios, todos estamos bien, pero exigimos una investigación sobre lo ocurrido. Me duele el miedo y la impotencia que vi en los ojos de todos los presentes. No podemos seguir así. ¡Mañana cambiemos el rumbo!”, declaró.
Ante las preguntas de la prensa, el equipo de campaña de Sonnenholzner no precisó si la balacera estaba dirigida hacia el exvicepresidente (diciembre de 2018 a julio de 2020), quien aspira a llegar al poder al igual que otros siete candidatos.
La policía, por su parte, informó que está “cotejando” la información sobre los disparos y agregó que hubo una persecución policial en la zona debido a un asalto a una tienda.
Este sábado por la madrugada, el alcalde de la localidad costera de La Libertad, ubicada en el suroeste, Francisco Tamariz, denunció que fue víctima de un ataque a tiros.
“Intentaron asesinarme”, expresó el político a través de X, añadiendo que hay “más de 8 testigos” del atentado registrado hacia la medianoche del viernes, en el que aparentemente participaron agentes de policía.
Tamariz señaló que salió ileso del ataque junto a su esposa y otros dos allegados que viajaban en un vehículo blindado, el cual fue blanco de unos 30 disparos.
El alcalde de esa población, que cuenta con unos 100.000 habitantes, dijo posteriormente en Facebook que, al regresar de Guayaquil, su camioneta blindada fue atacada a tiros por dos personas vestidas de civil que descendieron de un vehículo policial.
“En cuestión de segundos comenzaron a acribillar el vehículo (...), comenzaron a dispararnos, jamás preguntaron quién iba ahí”, expresó el funcionario en una declaración que ofreció junto a su esposa, ambos vestidos con chalecos antibalas.
“Si la camioneta no estuviera blindada, yo no estaría aquí. Sería imposible que yo estuviera hablando con 30 tiros que fueron (...) dirigidos hacia la camioneta en la que me estaba transportando”, añadió.
Tamariz es afín al exmandatario socialista Rafael Correa (2007-2017), quien reside en Bélgica desde que dejó el poder y cuya candidata, Luisa González, es favorita para la elección presidencial de este domingo.
Hasta el momento, la policía y el gobierno no se pronunciaron sobre este hecho.
Ecuador enfrentó en los últimos años una ola de violencia vinculada al narcotráfico, con matanzas en las cárceles que dejaron más de 430 presos muertos desde 2021, y un aumento récord en el número de homicidios, con 26 por cada 100.000 habitantes en las calles en 2022, casi el doble que el año anterior.
El 9 de agosto, el candidato presidencial centrista Fernando Villavicencio, un acérrimo opositor al correísmo y quien marchaba en segundo lugar en la intención de voto según una encuesta, fue asesinado a tiros al salir de un mitin en Quito.
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Tras el crimen, el gobierno decretó el estado de excepción.
En plena campaña para los comicios de este domingo, también fueron asesinados otro alcalde, un aspirante a diputado y un dirigente local del correísmo.
El jueves, durante el cierre de campaña, el candidato presidencial Daniel Noboa, de derecha, denunció un atentado con disparos contra su caravana, del cual salió ileso. Las autoridades contradicen su versión.
Tras el asesinato de Villavicencio, el presidente Guillermo Lasso decretó el estado de excepción por 60 días en todo el país, lo que le permite movilizar a militares para fortalecer la seguridad en los comicios.
En las elecciones también se designará al vicepresidente en binomio y a los 137 miembros de la Asamblea Nacional, que disolvió en mayo en medio de una crisis política.
Lasso responsabilizó del inédito asesinato de un candidato presidencial a la delincuencia organizada, pero luego sostuvo que se trató de un crimen político, ya que seis colombianos están detenidos, mientras que otro murió en un enfrentamiento a tiros con los escoltas de Villavicencio.
El partido de centro Construye, que auspiciaba a Villavicencio, designó en su reemplazo al periodista de investigación Christian Zurita. El trabajo de ambos llevó a que Correa sea condenado en ausencia a ocho años de cárcel por corrupción.