Liberia y Freetown
Un destacado médico que trabajaba en el hospital más grande de Liberia murió por ébola, informaron este domingo funcionarios del gobierno, un hecho que subraya los riesgos que enfrentan los trabajadores sanitarios que combaten a la enfermedad letal.
El doctor Samuel Brisbane es el primer médico liberiano en morir tras el brote de la enfermedad, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha causado la muerte de 129 personas en ese país de África occidental.
La OMS informó que el brote, el mayor registrado jamás, también ha causado la muerte de 319 personas en Guinea y 224 en Sierra Leona.
Brisbane, quien fue consejero del expresidente Charles Taylor en cuestiones de salud, trabajaba como consultor en la unidad de medicina interna del país del mayor hospital del país, el Centro Médico John F. Kennedy, en Monrovia.
Tras contagiarse de ébola fue llevado a un centro de tratamiento en las afueras de la capital, donde murió, dijo Tolbert Nyenswah, ministro de salud asistente.
Nyenswah agregó que otro doctor que estaba trabajando en el condado Bong, en el centro del país, también recibía tratamiento para el ébola en el mismo hospital en que Brisbane murió. La situación "se está volviendo cada vez más aterradora", dijo el funcionario.
La noticia de la muerte de Brisbane comenzó a correr el sábado, día en que se conmemora la independencia de Liberia, decretada en 1847.
La presidenta Ellen Johnson Sirleaf aprovechó su discurso por el día de la independencia para hablar de un nuevo grupo de trabajo que combatirá el ébola. El ministro de Información, Lewis Brown, dijo que el grupo irá "de comunidad en comunidad, de aldea en aldea, de pueblo en pueblo" para aumentar la concientización.
Los trabajadores sanitarios corren un grave riesgo de contraer la enfermedad, que se contagia por contacto con fluidos corporales.
En Sierra Leona, la enfermedad cobró la vida Saudatu Koroma, una peluquera aprendiz de 32 años de edad , quien murió el sábado cuando se dirigía a un centro de tratamiento de ébola en el este del país .
"Ella estaba severamente deshidratada y débil y apenas podía hablar ", dijo Sidi Yahya Tunis el, ministro de Salud de Sierra Leona, país donde la enfermedad ya cobró la vida de más de 200 personas.
La enfermedad del ébola contabiliza más de 650 personas muertas en cuatro países de África occidental en lo que va del 2014.
El médico más importante en la lucha contra el ébola en Sierra Leona murió la semana pasada por la enfermedad, y el médico estadounidense Kent Brantly, quién colabora en la lucha contra la fiebre hemorrágica producida por el ébola, está infectado en Liberia.
No hay cura conocida para el ébola, cuyos síntomas iniciales son la fiebre y el dolor de garganta pero que después se transforma en vómitos, diarrea y hemorragias internas y externas.