Doha. AFP. Estados Unidos acelerará sus ventas de armas a los países árabes del Golfo, anunció el lunes, en Doha, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, en un momento en que las monarquías sunitas están preocupadas por las consecuencias del acuerdo con Irán.
Kerry dijo que su país va a acelerar los envíos tras reunirse con sus homólogos de los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) , compuesto por Arabia Saudí, Baréin, Emiratos Árabes Unidos, Omán, Kuwait y Catar.
“Nos pusimos de acuerdo para acelerar algunas ventas de armas que son necesarias y que tardaron demasiado tiempo”, declaró Kerry durante una conferencia de prensa en Catar.
Prometió que Washington y los países árabes intensificarán esfuerzos para compartir información y aumentarán los ejercicios militares conjuntos.
Garantías. Con su gira por Oriente Medio, Kerry busca ofrecerles garantías a los países árabes sobre las consecuencias en la región del acuerdo sobre el programa nuclear iraní, logrado el 14 de julio, con el objetivo de asegurar que el programa nuclear de Teherán tenga un carácter civil.
“Hablamos de que vamos a aumentar el número de ejercicios que hacemos conjuntamente”, afirmó Kerry.
Su anfitrión, Jaled al-Attiya, destacó que entre los países del golfo Pérsico hay respaldo a lo pactado con Irán.
“Fue la mejor opción, entre otras opciones, para solucionar el tema de las armas nucleares de Irán, a través del diálogo”, manifestó el ministro catarí, quien se expresó en árabe.
Las monarquías del Golfo recelan mucho de las ambiciones regionales de Teherán, aunque Arabia Saudí, gran rival de Irán en la región, ha expresado oficialmente su apoyo al acuerdo sobre el programa de energía nuclear.
Kerry sostuvo un encuentro tripartito inédito con sus homólogos ruso y saudí, Serguéi Lavrov y Adel al-Jubeir, para hablar, esencialmente, del conflicto en Siria, donde, solo ayer, murieron al menos 30 personas por la caída de un avión de combate en una ciudad del norte del país.
El domingo en El Cairo, el jefe de la diplomacia estadounidense ya aseguró ante sus anfitriones egipcios que el acuerdo con Irán reforzaría la seguridad de los países árabes.
“No cabe ninguna duda de que si se aplica completamente el acuerdo de Viena, Egipto y todos los países de esta región estarán más seguros que nunca”, afirmó Kerry.
Una vez más, el diplomático dijo el domingo que “Irán estaba inmerso en actividades desestabilizadoras en la región y por ello es tan importante asegurarse de que su programa nuclear es enteramente pacífico”.
El domingo, el presidente iraní, Hasán Ruhaní, declaró en una entrevista televisada que el acuerdo sobre el programa nuclear de su país con las grandes potencias creará “un nuevo clima” para solucionar crisis regionales como la de Yemen o Siria.
“La solución definitiva en Yemen es política; en Siria la solución es política. El clima va a ser mejor para las acciones que queremos realizar y nuestros principios serán mantenidos”, sostuvo Ruhaní.
Teherán y Riad, principales potencias chiita y sunita –respectivamente– de la región, son rivales en ambos conflictos.
Peso pesado del Golfo, Arabia Saudí dirige una coalición que bombardea desde marzo las posiciones de los rebeldes chiitas hutíes en Yemen para evitar que los insurgentes, apoyados por Irán, se hagan con el control de todo el país.
En Siria, Irán es el principal aliado regional del régimen del presidente Bashar al Asad, combatido por una oposición en parte apoyada por Arabia Saudita.
El acuerdo nuclear estipula que Teherán no se dotará jamás de la bomba nuclear, a cambio de un levantamiento progresivo de las sanciones internacionales que ahogan su economía.