Piongyang. Varias horas de negociaciones y dos visiones contrarias: Estados Unidos calificó como “muy productivas” las conversaciones de este fin de semana para desmantelar el arsenal nuclear de Corea del Norte, mientras en Pionyang consideraron “muy lamentable” la actitud de Washington.
Poco después de que el jefe de la diplomacia estadounidense Mike Pompeo sostuvoque las conversaciones durante dos días en Pionyang para concretar la desnuclearización de Corea del Norte fueron “muy productivas”, su contraparte norcoreana denunció las “exigencias codiciosas” y una actitud “muy lamentable” de Washington.
“La actitud y posiciones de Estados Unidos en las conversaciones de alto nivel el viernes y el sábado fueron muy lamentables”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte en un comunicado citado por la agencia de noticias Yonhap.
En el informe más bien optimista que dio Pompeo el sábado a la prensa, antes de llegar a Tokio desde la capital norcoreana, reveló pocos detalles nuevos sobre cómo Corea del Norte podría cumplir con sus compromisos para una “desnuclearización” a cambio de garantías de seguridad de Estados Unidos.
“Estos son asuntos complicados, pero hemos progresado en casi todos los asuntos centrales, en algunos temas se ha progresado mucho, en otros todavía hay más trabajo por hacer”, expresó.
LEA MÁS: Compromiso de Kim Jong-un con la desnuclearización suscita interrogantes
Pompeo hizo estas declaraciones tras finalizar en Pionyang conversaciones por más de ocho horas en dos días con Kim Yong-chol, el brazo derecho del líder norcoreano, Kim Jong-un, con el objetivo de concretar el prometido plan de desnuclearización.
Luego, el enviado de Estados Unidos partió a Tokio, donde debía informar a sus contrapartes de Japón y Corea del Sur sobre los resultados de estas conversaciones.
“Hablamos sobre lo que los norcoreanos continúan haciendo y cómo podemos hacer todo lo posible para lograr lo que el dirigente Kim y el presidente Trump acordaron, que es la desnuclearización total de Corea del Norte”, dijo.
“Nadie se alejó de ese objetivo, todavía siguen igual de comprometidos. El dirigente Kim todavía está comprometido, tuve la oportunidad de hablar con el presidente Trump esta mañana”, agregó sobre una llamada que hizo retirándose del lugar donde se sostenían las reuniones para hacerla bajo estrictas medidas de seguridad.
“Yo sé que mi contraparte también habló con el dirigente Kim durante el curso de nuestras negociaciones. Tuvimos negociaciones productivas, de buena fe”, afirmó.
No obstante, en términos prácticos, Pompeo indicón que solo los funcionarios de ambos países se reunirían el 12 de julio en un grupo de trabajo para discutir la repatriación de los restos de algunos soldados estadounidenses muertos durante la Guerra de Corea de 1950-1953.
También señaló que se habían hecho algunos progresos para acordar “las modalidades” de la destrucción de una instalación de misiles por parte de Corea del Norte.
El objetivo del encuentro fue establecer una hoja de ruta detallada en vista a la “desnuclearización completa” de la península coreana, como convinieron en la reunión histórica de Singapur del 12 de junio el presidente estadounidense, Donald Trump, y Kim Jong-un.
Sec. of State Mike Pompeo arrives in Pyongyang, North Korea, for his fourth round of meetings with nuclear negotiators. https://t.co/janpEtNy4Y pic.twitter.com/g1Uw9FkEVy
— ABC News (@ABC) July 6, 2018
Las conversaciones del sábado se llevaron a cabo en una villa de un complejo oficial cerca del imponente mausoleo donde reposan los cuerpos de los exdirigentes de Corea del Norte Kim Il-sung y Kim Jong-il -abuelo y padre del líder actual-.
En unas declaraciones al inicio del encuentro, Kim Yong-chol le preguntó a Mike Pompeo cómo durmió en su primera noche en el país. “Sostuvimos una discusión muy seria sobre temas muy importantes ayer”, declaró el responsable norcoreano. “Por lo tanto, pensando en esas discusiones, quizás usted no durmió bien anoche”, agregó.
Pompeo, por el contrario, dijo que “durmió muy bien”, pero este cruce dio a entender que las discusiones pendientes serán más difíciles.
“El trabajo que hemos llevado a cabo sobre una desnuclearización completa, estableciendo una relación entre nuestros dos países, es vital para una Corea del Norte más radiante y el éxito que nos exigen nuestros dos presidentes”, manifestó el secretario de Estado.
El brazo derecho del líder norcoreano destacó el viernes que se trataba de la tercera visita a Corea del Norte del alto funcionario estadounidense.
El viernes, Kim Yong-chol dijo a Pompeo que “cuanto más nos reunamos, más profunda será nuestra amistad”, declaró.
Pompeo, acompañado de altos funcionarios del Departamento de Estado y de la CIA, conversó ese primer día durante casi tres horas con sus anfitriones norcoreanos, antes de pasar su primera noche en Pionyang.
Washington espera que el proceso de desnuclearización se active este año. Pero muchos expertos y detractores del presidente Trump consideran que la promesa del dirigente norcoreano durante la cumbre no es creíble y que el proceso, aunque empiece, podría llevar años.