“Hemos visto las informaciones sobre los bombarderos, y es algo realmente preocupante. Hemos dicho ya que los rusos podrían hacer algo como esto para justificar un conflicto militar”, aseguró Austin a periodistas después de una reunión en Bruselas con los ministros de defensa de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El funcionario estadounidense afirmó que Rusia seguía aumentando su contingente y capacidad militar junto a las fronteras de Ucrania, aunque el gobierno en Moscú insiste en que había iniciado la retirada de esas tropas. Austin aseguró que el número de soldados rusos ya se aproximaba a 150.000, y apuntó que “vemos que algunas de esas tropas se acercan poco a poco a esa frontera”.
Los aliados de la OTAN, según Austin, han detectado fuerzas rusas “volar en más aviones de combate y de apoyo. Los vemos agudizar su preparación en el Mar Negro. Incluso los vemos abastecerse de sangre”. Fuerzas ucranianas y separatistas prorrusos en la región oriental de Lugansk intercambiaron en la jornada acusaciones de una escalada en los combates.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, epresó que el bombardeo había dañado un jardín de infantes, y consideró que fue una “gran provocación”. Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que la alianza miliar estaba “preocupada” con la posibilidad de que Rusia busque un pretexto para invadir Ucrania. ”Todavía no hay claridad ni certeza sobre las intenciones rusas, no sabemos qué pasará”, añadió.
En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.