Kiev. El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, pidió el lunes a los habitantes de la capital ucraniana que huyeron del conflicto que no regresen hasta “al menos otra semana”.
“En primer lugar, hay toque de queda las 24 horas del día en varios distritos de la región de Kiev. También en las ciudades cercanas a la capital, donde continúan los combates, se ha encontrado un gran número de artefactos explosivos, lo que puede suponer una gran amenaza”, dijo.
LEA MÁS: Al menos 10 civiles muertos y 46 heridos en bombardeos de Mikolaiv
"No descartamos la posibilidad de que se disparen cohetes. Sí, nuestras fuerzas de defensa aérea están trabajando perfectamente. Pero puede ocurrir cualquier cosa. Así que pido a la gente que espere un poco y no vuelva", añadió.
Ucrania y los países occidentales dudan de la promesa de Rusia de reducir la actividad militar en torno a Chernígov y la capital, Kiev, durante conversaciones cara a cara el pasado martes en Estambul.
Según militares ucranianos, la retirada de las tropas rusas en torno a Kiev y Chernígov "es probablemente una rotación de unidades individuales y tiene como objetivo engañar".
Regreso de ucranianos
Se reportan más de 500.000 personas de vuelta en Ucrania, desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero, informó el Ministerio del Interior ucraniano este domingo.
“En la última semana, 144.000 personas abandonaron Ucrania y 88.000 llegaron. En total al menos 537.000 compatriotas regresaron a Ucrania”, dijo el Ministerio en un comunicado, citando datos del servicio estatal de fronteras.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) aseguró el sábado que 4.176.401 ucranianos salieron hacia otros países desde que estalló el conflicto, 38.559 más que los registrados el día anterior.
Es el mayor flujo de refugiados desde la segunda Guerra Mundial, con un total de 10 millones de personas —más de un cuarto de la población de este país de más de 37 millones de habitantes— que dejaron sus hogares.
LEA MÁS: Bucha llora a sus muertos cerca de fosas comunes tras retirada rusa