La Procuraduría General de la República (PGR) de México insistió este lunes en que los estudiantes que desaparecieron hace casi un año en Iguala fueron incinerados en un basurero del municipio de Cocula, si bien ahora matizó que no puede asegurar que fueron los 43.
"Estamos seguros que (...) fueron quemados un número importante" de estudiantes en el basurero de Cocula, declaró a Imagen Radio el jefe de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, Tomás Zerón, al responder al informe presentado este domingo por los expertos de la CIDH que estudian el caso desde hace seis meses.
Dijo que no puede afirmar "que fueron los 43, pero sí un grupo importante" de ellos, ya que los peritajes realizados por la PGR y que están en el expediente del caso "son contundentes".
Sin embargo, el especialista peruano en incendios José Torero, contratado por el grupo de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), concluyó que no hay evidencia que permita asegurar que los jóvenes, ni siquiera uno de ellos, fueron quemados en el basurero.
Dicho peritaje contradice la versión oficial ofrecida en noviembre por el entonces fiscal, Jesús Murillo, según la cual los jóvenes fueron asesinados por miembros del cartel Guerreros Unidos e incinerados en una enorme hoguera que ardió durante horas.
Al insistir en esta versión, Zerón indicó que "una de las pruebas que tienen llegó de parte del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck (Austria), que les confirmó la presencia de uno de los estudiantes en ese lugar".
Zerón aludió a la identificación de Alexander Mora, uno de los 43 alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa que desaparecieron el 26 de setiembre del 2014 tras una ola de ataques armados, a partir de un resto hallado en la vera del Río San Juan, aledaño al basurero.
No obstante, el equipo de forenses argentinos que participa en la investigación explicó hace meses que cuando llegó a la vera del río San Juan la bolsa de donde fue extraída la muestra que permitió la identificación de Mora ya estaba abierta.
"No existen elementos científicos suficientes para vincular los restos hallados en el basurero con los recuperados en el Río San Juan", señaló entonces el equipo.