Managua. El gobierno de Nicaragua excarceló este viernes a 50 detenidos por participar en protestas contra el presidente Daniel Ortega, y los puso en régimen de arresto domiciliar y otras medidas cautelares, informaron las autoridades.
Los detenidos "por haber cometido delitos contra la seguridad común y tranquilidad pública" recibieron el beneficio de la convivencia familiar y otras medidas cautelares, indicó el Ministerio de Gobernación en una nota de prensa.
La salida de los presos fue inesperada, a diferencia de los casos anteriores en que familiares de los reos y medios de prensa llegaron a los centros penales a esperar la liberación.
La excarcelación se produce dos días después de que el gobierno y la alianza opositora concluyeron las negociaciones sin un acuerdo en temas clave como justicia y democracia, y en momentos que el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) discute la situación del país.
El gobierno y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) habían acordado el pasado 20 de marzo la liberación total de los opositores detenidos en un plazo de 90 días, mediante un proceso supervisado por la Cruz Roja Internacional (CICR).
Familiares y organismos de derechos humanos calculan que más de 800 personas han sido detenidas durante las protestas, y que estarían en distintas cárceles del país en condiciones de aislamiento y malos tratos. El gobierno, por su parte, ha dicho que son 350.
El gobierno ha excarcelado a 200 personas desde el 27 de febrero cuando se iniciaron las negociaciones con la oposición, que buscan una salida a la crisis que vive Nicaragua tras las protestas antigubernamentales que se iniciaron el 18 de abril del año pasado.
Las manifestaciones estallaron en contra de una fallida reforma a la seguridad social que derivó en una demanda de renuncia del presidente Daniel Ortega, acusado de actos de corrupción e instaurar una dictadura.
“El CICR no está involucrado en la liberación de las 50 personas anunciada hoy (viernes)”, dijo el oficial de Comunicación de la delegación regional de ese organismo, Alberto Cabezas.
La delegación de la CICR sostuvo el jueves una reunión con delegados del gobierno y la alianza para cotejar las listas de detenidos que tienen ambas partes, según dijeron voceros de la oposición.
Cabezas manifestó: “No estamos en condiciones de determinar ni fechas ni plazos en que se dará ese proceso” de liberación de opositores detenidos.
El gobierno indicó en un comunicado que la excarcelación de este viernes fue "por voluntad y compromiso propio".
Un delegado de la oposición en el diálogo, el exvicecanciller José Pallais, reclamó que el gobierno ha demorado mucho en cumplir con el compromiso de liberar a los presos.
“El gobierno estaba obligado por los acuerdos a continuar con la liberación antes que el CICR comenzara a trabajar (...) Esto es algo que se ha tardado mucho”, declaró Pallais a la prensa.
Aseguró que "hay presos con hasta cinco meses fuera del marco legal porque nunca fueron puestos a la orden de un tribunal competente".
Esperanza de libertad
“Tenía la esperanza de salir, pero siempre (cada excarcelación) nos tomaba por sorpresa”, manifestó el psicólogo Róger Martínez, de 35 años, uno de los 50 liberados.
"No estoy claro qué tipo de medida me han otorgado" para salir de la cárcel, aseguró Martínez, tras nueve meses de prisión por una condena de cuatro años y medio por cargos de fabricación y tráfico de municiones y explosivos.
“No sabíamos nada, ayer fuimos a visita, pero no sabíamos ni nos dijeron nada” de la excarcelación, declaró en un mar de llanto una familiar de Fener Dávila, otro excarcelado que fue llevado por agentes penitenciarios a su vivienda en la ciudad de Masaya, 30 km al sur de la capital.
Decenas de vecinos rodearon la vivienda de Dávila para darle la bienvenida tras pasar varios meses detenido en la cárcel La Modelo, al norte de Managua, según imágenes divulgadas por redes sociales.
“Nos llegaron a levantar a las dos de la mañana y comenzaron a pasar lista, allí comenzó el proceso para liberarnos, (nos dieron) a firmar una hoja y luego nos trajeron en una camioneta”, contó Jefferson Padilla en su casa en Managua, tras estar siete meses detenido.