Ramstein, Alemania. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, advirtió al nuevo gobierno talibán que debe “ganarse” su legitimidad ante la comunidad internacional, a la que Estados Unidos movilizó este miércoles para ofrecer una respuesta coordinada a la crisis afgana.
Blinken pasó una parte del día en la base área de su país en Ramstein, en el sureste de Alemania, por donde transitan miles de evacuados de Afganistán.
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El jefe de la diplomacia estadounidense llegó allí desde Catar, donde también visitó el principal centro de tránsito de refugiados afganos.
Al final de una reunión virtual a nivel ministerial entre 20 países respecto a la crisis afgana, Blinken advirtió que la comunidad internacional juzgará al gobierno interino afgano “por sus acciones”.
“Los talibanes buscan una legitimidad internacional. Toda legitimidad, todo apoyo, deberá ganarse”, señaló en una conferencia de prensa junto a su homólogo alemán Heiko Maas.
Con sus socios, Blinken explicó haber discutido “la manera en la que vamos a hacer que los talibanes respeten sus compromisos y obligaciones: dejar que la gente viaje libremente para respetar sus derechos fundamentales, incluidas las mujeres y las minorías; velar por que Afganistán no sea utilizado como base para ataques terroristas; no ejercer represalias contra aquellos que eligen quedarse en Afganistán”.
‘Pakistán estuvo presente’
Un alto cargo del departamento de Estado sostuvo que todos los países compartían en grandes rasgos la posición que se debe adoptar ante el nuevo gobierno talibán, incluido Pakistán, al que se le reprocha haber apoyado a los insurgentes.
“Pakistán estuvo presente” en la reunión, declaró el alto funcionario a la prensa en el avión de Blinken. “Hablaron de su rol único, de su punto de vista y de la idea de que se encuentran en una posición en la que deben comprometerse en cierta medida”, precisó.
“Un Afganistán estable y pacífico no puede lograrse sin un compromiso regional e internacional más importante, y no menos importante. Pakistán, como vecino inmediato, no puede permitirse desentenderse” de la situación, aseguró en Twitter el ministro de Exteriores paquistaní, Shah Mahmood Qureshi.
Por la tarde, Blinken visitó la base militar, transformada desde fines de agosto en un gigantesco campo de refugiados evacuados desde Afganistán por las fuerza aérea de Estados Unidos.
En el hangar donde esperan sus vuelos a Estados Unidos una parte de los 11.000 afganos refugiados en Ramstein, Blinken se puso de cuclillas y mostró fotos de sus propios hijos a otros niños, algunos hijos de afganos que trabajaron para Estados Unidos.