Caracas. Un grupo de militares venezolanos se sublevó este martes contra el presidente chavista Nicolás Maduro y en apoyo al presidente interino, Juan Guaidó, quien llamó a toda la Fuerza Armada a sumarse al movimiento, que el gobierno denunció como un intento de golpe de Estado.
Maduro aseguró tener la “total lealtad” de la jefatura militar, tras expresiones de apoyo de varios miembros del alto mando militar.
“¡Nervios de Acero! He conversado con los Comandantes de todas las REDI y ZODI del País, quienes me han manifestado su total lealtad al pueblo, a la Constitución y a la patria”, señaló el mandatario en Twitter en su primera reacción.
¡Nervios de Acero! He conversado con los Comandantes de todas las REDI y ZODI del País, quienes me han manifestado su total lealtad al Pueblo, a la Constitución y a la Patria. Llamo a la máxima movilización popular para asegurar la victoria de la Paz. ¡Venceremos!
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) April 30, 2019
La Fuerza Armada “se mantiene firme en defensa de la Constitución Nacional y sus autoridades legítimas”, señaló el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino, en Twitter.
Guaidó llamó este martes a sus partidarios a tomar las calles hasta lograr la caída de Maduro."¡El momento es ahora! Los 24 estados del país han asumido el camino: calle sin retorno. El futuro es de nosotros: pueblo y Fuerza Armada unidos por el cese de la usurpación", escribió en Twitter.
Aún de madrugada, Guaidó publicó un video junto a un pequeño grupo de uniformados que, según dijo, fue grabado dentro de La Carlota, principal base aérea de Venezuela en el este de Caracas.
“Hoy, valientes soldados, valientes patriotas, valientes hombres apegados a la Constitución han acudido a nuestro llamado, hemos acudido también al llamado, nos hemos encontrado definitivamente en las calles de Venezuela”, expresó.
"Han sido años de miedo, hoy se vence ese miedo, hoy como presidente encargado de Venezuela, legítimo comandante en jefe de la Fuerza Armada, convoco a todos los soldados (...) a acompañarnos en esta gesta en el marco del Constitución, en el marco de la lucha no violenta", agregó Guaidó.
El jefe del Parlamento apareció además junto con Leopoldo López, su copartidario quien dijo haber sido "liberado" de la prisión domiciliaria por los militares que apoyan a Guaidó.
“Nosotros también somos pueblo y ya estamos cansados de esta dictadura”, manifestó bajo anonimato uno de los insurrectos, en los alrededores de la instalación.
Desde el interior de la base, uniformados leales a Maduro lanzaron bombas lacrimógenas contra opositores que atendieron el llamado de Guaidó a tomar las calles para apoyar el “cese definitivo de la usurpación”.
“No me voy a quedar en casa con los brazos cruzados mientras el régimen de Maduro nos oprime”, declaró Carlos, de 26 años, listo para tirar un cóctel molotov en el sector de Altamira.
El representante de Guaidó en Washington, Carlos Vecchio, precisó en un tuit que los venezolanos con uniforme o sin este, leales a Guaidó, que buscan “el cese de la usurpación” se identifican exhibiendo una cinta azul y los exhortó a dirigirse hacia La Carlota.
Gobierno: ‘situación controlada’
El gobierno denunció el hecho como un “intento de golpe de Estado” y manifestó que la situación está controlada.
“En estos momentos estamos enfrentando y desactivando a un reducido grupo de efectivos militares traidores que se posicionaron en el distribuidor Altamira para promover un golpe de Estado”, aseguró el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, quien se refirió al caso como un “intento” detrás del cual está la “derecha golpista”.
“Llamamos al pueblo a mantenerse en alerta máxima para, junto a la gloriosa Fuerza Armada Nacional Bolivariana, derrotar el intento de golpe y preservar la paz”, añadió Rodríguez.
El número dos del chavismo, Diosdado Cabello, aseveró que el levantamiento es obra de una “pequeñísima fracción de la Fuerza Armada y el Sebin (servicio de inteligencia)”, el cuerpo que vigilaba a López.
“Generan una alarma de un golpe militar en Venezuela, no lo lograron porque hay una cohesión con nuestros militares”, afirmó Cabello, quien llamó a oficialismo a movilizarse hacia el palacio de Miraflores en apoyo a Maduro.
Algunas decenas de chavistas se reunían en las proximidades de la sede gubernamental.
Los opositores se concentraron en Altamira, en las inmediaciones de la base La Carlota, con banderas de Venezuela y celebrando el alzamiento. “¡Leopoldo, Leopoldo!”, gritaban muchos.
Conductores también tocaban las bocinas de sus vehículos en el este, donde además hubo cacerolazos.
En Maracaibo (oeste), duramente golpeada por continuos apagones, también había focos de protesta, en medio de patrullajes militares, informó Levy, habitante de esa ciudad petrolera.
Condena y respaldo
Los presidentes de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y de Bolivia, Evo Morales, aliados de Maduro, condenaron el "intento de golpe de Estado", mientras el mandatario colombiano, Iván Duque, llamó a los militares venezolanos a unirse a la rebelión.
Por su parte, el Gobierno español exhortó a evitar un “derramamiento de sangre”, en tanto Bogotá anunció una reunión urgente del Grupo de Lima, bloque de países que apoya a Guaidó.
Se prendieron las antorchas! Saber esperar trae consigo sus frutos en la firmeza. El sonido de la marcha ya está aquí, romperemos las ventanas d los cielos gozándonos de júbilo y deleitándonos en la libertad de su patria. ¡Viva Venezuela! Pasa la voz porq #llegoeldia #venezuela pic.twitter.com/kUUiTLs3QS
— DANIEL HABIF (@DanielHabif) April 30, 2019
Los militares son considerados la columna vertebral de Maduro, quien les ha otorgado amplio poder político y económico.
Guaidó, quien juró como mandatario encargado el 23 de enero, no ha logrado aún quebrar el apoyo de la cúpula de la Fuerza Armada a Maduro, aunque dos días antes de su juramentación un grupo de soldados se amotinó en una base de Caracas para desconocer al líder chavista.
Guaidó, un ingeniero de 35 años, asumió las funciones presidenciales luego de que el Poder Legislativo, de mayoría opositora, declaró que Maduro usurpa el cargo por haber asumido un segundo mandato el 10 de enero fruto de “elecciones fraudulentas”.